Sin que hayan finalizado las investigaciones que determinen las razones por las cuales un avión y un helicóptero de las Fuerzas Militares se vinieron a tierra en tan solo cinco días, dejando 27 uniformados muertos y dos heridos, mañana el Gobierno deberá entregar explicaciones al Congreso en un debate de control político en la Comisión Segunda del Senado, reiterando su tesis que fue por el mal tiempo. 

Para tal fin los senadores que convocaron este debate, Iván Cepeda Castro (Polo Democrático Alternativo) y Oscar Mauricio Lizcano Arango (Partido de La U) citaron al recinto de  la Comisión al ministro de Defensa Nacional, Luis Carlos Villegas Echeverri, y al comandante de la Fuerza Aérea Colombiana, mayor General Carlos Eduardo Bueno Vargas.

“Vamos a pedirle al Gobierno que explique las razones de la caída del helicóptero en Antioquia y el avión en Cesar”, explicó el senador Mauricio Lizcano, quien señaló que es necesario que el país tenga plena claridad sobre las razones que produjeron estos siniestros”.

Algo inusual en el país por los pocos días que pasaron entre la ocurrencia de uno y otro choque y que ha levantado una aguda polémica, pues mientras que la hipótesis que tiene más fuerza para el Gobierno nacional es que se trata de accidentes, desde el opositor Centro Democrático se ha dicho que se podría tratar de derribamientos por manos de la guerrilla.

“Necesitamos que el Gobierno y la Cúpula Militar expliquen cuáles fueron las razones de los 2 últimos accidentes aéreos. Que nos expliquen si fue por una falla técnica o fueron impactados por algún artefacto explosivo. Ambas cosas son graves”, señaló el senador Lizcano.

Por su lado, el también senador Iván Cepeda dijo que “se trata de un debate de control político sobre la situación de la Fuerza Aérea y sus constantes accidentes, y también queremos saber la manera en que estos aviones son adquiridos y sus respectivos mantenimientos”.

Mientras que el senador Carlos Fernando Galán (Partido Cambio Radical) señaló que “la presentación de la investigación que haga el Gobierno puede despejar las dudas que tienen algunos sectores y no especular sobre este tipo de situaciones”.

¿Acto terrorista?

Desde la semana pasada se oyeron varias voces en el Centro Democrático, como los senadores Alfredo Rangel y Álvaro Uribe, tras el siniestro el martes anterior de un helicóptero Black Hawk en la región de Urabá en Antioquia, que dejó 16 policías muertos y dos más heridos, en el sentido que la aeronave habría sido impactada.

Uribe Vélez  argumentó que tenía conocimiento que uno de los dos policías que sobrevivieron presentaba herida de bala. Además le hizo eco a un audio de un uniformado que se trasportaba en uno de los helicópteros que acompañaban a la aeronave siniestrada, a quien se le oye decir que aparentemente habría sido impactado por un tatuco.

El senador Uribe Vélez indicó que “hemos venido publicando todo lo que ha venido llegando de la comunidad y hoy tenemos en el íntimo convencimiento la grave preocupación de que este doloroso asesinato de soldados y policías, en Urabá y en el Cesar fue causado por el terrorismo”.

El Gobierno

Durante la celebración el viernes pasado de los 196 años del Ejército Nacional, el presidente Santos llamó mentirosos a quienes han esparcido la especie que estas aeronaves fueron derribadas. “Son esos mismos que dicen que el avión de la FAC lo derribó el enemigo, que el helicóptero de la Policía lo derribó el enemigo”.

Por su parte el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, poniendo primero de presente que se están adelantando las investigaciones por estos siniestros, aseguró sobre el accidente del helicóptero que “ninguno de los dos heridos, el que ha sido trasladado a Bogotá, que está en mejor condición, el patrullero, y el intendente que todavía está en Apartadó (Antioquia) en graves condiciones de salud, no presentan impactos de arma de fuego”.

Añadió que “seguimos con la hipótesis más probable en el sentido de que fue un choque tremendamente destructor de nuestro helicóptero Black Hawk contra la ladera donde estaban haciéndose las operaciones y con una complicación sobre la maniobrabilidad de la aeronave por cuenta del mal tiempo”.

Villegas atribuyó también a las malas condiciones climáticas el siniestro del Casa 235 en el Cesar."Las conclusiones iniciales de la investigación, que aún se sigue llevando a cabo, se puede decir que hubo condiciones meteorológicas adversas para esa clase de avión y de vuelo".