La ONU denunció el viernes en Ginebra un nuevo escándalo de abusos sexuales presuntamente cometidos por soldados extranjeros contra niños en República Centroafricana, y por primera vez nombró cinco países cuyos militares estarían implicados.
Los presuntos delitos tuvieron lugar sobre todo en 2014 pero no se tuvo constancia de ellos hasta estas últimas semanas, explicó el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, quien se declaró "muy alarmado" por estas nuevas acusaciones.
Un equipo de la ONU en República Centroafricana habló con varios niños y adolescentes que declararon haber sufrido abusos sexuales o explotación por parte de soldados extranjeros.
Según cuatro chicas adolescentes, de entre 14 y 16 años en el momento de los presuntos hechos, los agresores pertenecían a contingentes de la fuerza de la Unión Europea (Eufor-RCA), que no forma parte del contingente bajo órdenes de la ONU, la Minusca.
Los soldados y policías que sí pertenecen al Minusca provendrían de Bangladesh, Marruecos, República Democrática del Congo, Níger y Senegal.
Tres de las jóvenes creen que sus agresores formaban parte del contingente georgiano del Eufor-RCA.
También hay sospechas sobre soldados "de otro país" que operan en el seno del Eufor, pero la ONU no quiso decir nada más "a la espera de corroboraciones".
"Los soldados no han sido identificados" por el momento, precisó en Bruselas una fuente europea, que aseguró que las acusaciones involucraban "al menos a diez soldados".
El ministerio georgiano de Defensa prometió "hacer todo lo posible para garantizar que los que cometieron esos crímenes sean reconocidos responsables".
Unos 150 soldados georgianos participaron en el Eufor-RCA, que contaba con unos 700 hombres, presentes entre febrero de 2014 y marzo de 2015 en Bangui, con la misión de restablecer la seguridad.
La UE, que toma esas acusaciones "muy en serio" prometió entregar a los investigadores todas las informaciones "potencialmente pertinentes" sobre el caso.
Según la ONU, dos hermanos, una niña y un niño que tenían 7 y 9 años respectivamente en el momento de los supuestos hechos, declararon por otra parte haber sufrido abusos sexuales en 2014, presuntamente cometidos por efectivos de las tropas francesas Sangaris.
La niña afirmó haber practicado actos sexuales por vía oral a soldados franceses a cambio de una botella de agua o un paquete de galletas.
Y, al igual que su hermano, aseguró que otros niños corrieron la misma suerte.
El ministro francés de Defensa, Jean Yves Le Drian, anunció que presentó ante la justicia las nuevas acusaciones.
- Soldados franceses -
En 2014 ya salió a la luz un primer escándalo que implicaba a soldados franceses.
Los presuntos hechos ocurrieron dentro o en los alrededores de un campo de refugiados interno en M'Poko, cerca del aeropuerto de Bangui, bajo protección de la Eufor y Sangaris en 2014.
El jefe de la Minusca, el gabonés Parfait Onanga-Anyanga, prometió "duras sanciones" tras estimar "absolutamente inaceptable que un solo soldado del mantenimiento de la paz esté implicado en esos actos horribles".
En Francia, cinco militares tuvieron que declarar ante el juez en diciembre pasado por otros casos de supuestos abusos que ocurrieron entre diciembre 2013 y enero 2014.
Sin embargo, ninguno de esos soldados ha sido formalmente inculpado y las audiencias no han permitido avanzar las investigaciones, según una fuente cercana a la investigación francesa.
Durante los interrogatorios, los soldados dijeron que entregaron a los menores raciones alimentarias, sin pedir nada a cambio, indicó.
Una empleada de la ONU de nacionalidad francesa fue la que denunció los presuntos hechos.
Otra investigación sigue su curso en Francia en torno a la presunta violación de una mujer centroafricana durante el verano de 2014, a manos de un militar francés.