Gabriel Sonny Cubillos

Periodista de El Nuevo Siglo

A finales del año 2017 o principios de 2018 culminaría el Centro de Memoria Histórica de recibir los testimonios de los cerca de 9 mil desmovilizados rasos del paramilitarismo que faltan por hacerlo sobre lo que conocieron en su participación en esa actividad ilegal, información que no será usada judicialmente pero que es vital para la construcción de la verdad.

La recuperación de la memoria del conflicto colombiano con el fin de que ojalá no se repitan las violaciones a los derechos humanos que se han presentado, así como la obtención de la verdad son algunos de los propósitos de la Ley de Víctimas (1448 de 2011) y en ese sentido creó el Centro de Memoria Histórica.

Dicho organismo tiene la misión de reunir y recuperar todo el material documental, testimonios orales y por cualquier otro medio relativo a las violaciones a los derechos de la población civil que se han presentado por parte de los grupos guerrilleros, paramilitares y no pocos agentes del Estado.

En este sentido, el Centro de Memoria Histórica quedó a cargo de operar el Acuerdo de Contribución a la Verdad Histórica y la Reparación de que habla la Ley 975 de 2005 (Justicia y Paz), que permitió la desmovilización de la mayoría de integrantes de los grupos paramilitares que azotaban grandes zonas del país.

En los acuerdos para la verdad caben aquellas personas que, habiéndose desmovilizado de los grupos armados organizados al margen de la ley, hubieren incurrido únicamente en los delitos de concierto para delinquir simple o agravado, utilización ilegal de uniformes e insignias, utilización ilícita de equipos transmisores o receptores, y porte ilegal de armas de fuego o municiones de uso privativo de las Fuerzas Armados o de defensa personal, como consecuencia de su pertenencia a dichos grupos.

La información que entreguen estas personas les será tenida en cuenta por los jueces para definir su situación jurídica. De conformidad con la Ley 1424, quienes son certificados positivamente pueden tener el beneficio de la libertad, siempre y cuando no aparezcan vinculados en delitos graves o sean reincidentes en delitos actuales. 

Sobre el particular, el coordinador de la Dirección de Acuerdos por la Verdad en el Centro de Memoria Histórica, Álvaro Villarraga Sarmiento, le dijo a EL NUEVO SIGLO que “estamos avanzando de una manera importante con la participación de 14 mil personas desmovilizadas de grupos paramilitares, de los cuales ya más de 5 mil han terminado la entrega de relatos y de ello ya tenemos resultados finales de más de 2 mil. Quiere decir, que hemos certificado la mayoría positivamente por sus contribuciones”.

Agregó que los desmovilizados que no han entregado una contribución suficiente son llamados repetidamente para que lo hagan o son certificados negativamente.

El funcionario explicó además que “ya venimos preparando tres informes regionales en Antioquia, en el Valle y Tolima, que esperamos entregar en el curso del año entrante”. 

Los que faltan

El coordinador de la Dirección de Acuerdos por la Verdad en el Centro de Memoria Histórica explicó que han logrado recibir los testimonios de cerca de tres mil personas por año, “significa que terminaríamos hacia el año 2018. En el 2017 pueda que todos hayan cruzado la ruta, pero la consolidación de la información y la producción de los informes contingentes está proyectada hasta el 2018”.

Como se dijo anteriormente, Villarraga anotó que la información que entregan los desmovilizados será usada con el fin de construir la memoria histórica, sin embargo, la que sea de carácter humanitario, “estamos buscando que sea aprovechada por entornos familiares y entornos comunitarios, y por entidades humanitarias que puedan dar lugar a ese tipo de circunstancias”.

Agregó que por mandato solo pueden utilizar esta información para los informes, pero tratándose de causas de tipo humanitario, sí se puede compartir sin quebrar el mandato de confidencialidad que les fue otorgado.