El ritmo de la bancarización avanza exitosamente. En el último año se vinculó al sector un millón de personas a través de cuentas de ahorro, por lo que a 2011 la proporción de mayores de edad con un producto financiero alcanzó 64,6 por ciento, cuando en 2007 era de 55 por ciento.
Así lo dio a conocer la presidenta de Asobancaria María Mercedes Cuéllar, quien afirmó que de cada 10 personas adultas en Colombia, 6,4 tienen un producto financiero. “Esto en términos absolutos equivale a 19,6 millones de personas”, dijo.
Para la dirigente gremial, los buenos resultados responden a que los bancos han ampliado su cobertura territorial gracias a nuevos mecanismos de aproximación a la gente, tales como los corresponsales no bancarios.
Asimismo, están desarrollando nuevas tecnologías, en especial a través de la banca móvil, que permiten a la ciudadanía acceder a servicios financieros por medio de los teléfonos celulares.
“Estamos a la espera de una ley que ponga en pie de igualdad a los diversos actores que provienen del sistema financiero y de los servicios postales. Aquí el mensaje de la banca ha sido claro: bienvenida la competencia, pero con igualdad normativa para todos”, comentó Cuellar.
La presidenta de Asobancaria también destacó el microcrédito pues, durante mucho tiempo, la banca ha insistido en que la represión financiera, y en particular los controles a las tasas de interés, impedían el mayor desarrollo del microcrédito.
“El Gobierno acertó al descongelar la tasa de usura del microcrédito, para que reflejara mejor las condiciones del mercado”, dijo Cuéllar, al tiempo que destacó que en un año el número de personas con microcrédito ha aumentado en 31 por ciento, esto es 359 mil personas.
De otro lado, Asobancaria destacó que el número de personas con crédito de vivienda creció 5,8 por ciento, al pasar de 691 mil personas en 2010 a 713 mil en 2011. Es de resaltar la tendencia positiva de esta modalidad que en 2011 tuvo 127 mil desembolsos, es decir, se otorgaron 527 créditos por día.
Por departamentos, San Andrés, Casanare y Guaviare fueron los que registraron un mayor número de personas con cuenta de ahorro en relación con su población total, después de Bogotá.
Además, en la mayoría de municipios la proporción de la población con cuenta de ahorro creció al igual que lo hizo la que posee al menos un crédito.
“Esto evidencia que a pesar de la marcada concentración del uso de productos financieros en las grandes ciudades, el esfuerzo por aumentar la inclusión financiera en todas las zonas del país está comenzando a rendir sus frutos”, dijo.
De otro lado, la líder gremial dijo que para el sector financiero es decepcionante que se elimine el lento desmonte gradual del 4 por mil previsto en la última reforma tributaria.
“Ese gravamen constituye un fuerte estímulo al uso del efectivo y que los países del mundo con sistemas tributarios sólidos son aquéllos que han logrado disminuir a un mínimo su utilización”, dijo.
Cuéllar destacó que el liderazgo del sistema financiero debe tener un respaldo total de la sociedad y el Estado, en el entendido que la regulación y la normatividad no pueden ser permeadas por una actitud que cree que el progreso individual debe hacerse a costa de los bancos.
“Colombia no tendrá el desarrollo financiero que requiere si toda la normatividad tiene vocación prudencial o se dirige a hacerles asumir costos a los bancos que deberían estar distribuidos en toda la sociedad”, dijo Cuéllar.