Juan de Jesús Lagares Almario, ex cabecilla del Bloque Bananero de las autodefensas, tras aceptar su responsabilidad en tres homicidios y un triple secuestro en la región de Urabá, fue condenado por el Juzgado Primero Penal Adjunto del Circuito Especializado de Antioquia a penas que suman 39 años de prisión.
El primer caso ocurrió el 24 de febrero de 1996 en la vereda Guapá del municipio de Mutatá (Antioquia), donde los paramilitares desaparecieron y asesinaron al comerciante Héctor Uriel Urrego Graciano, quien se movilizaba en un vehículo particular con su esposa y sus dos hijos menores de edad. La familia de la víctima fue retenida durante siete horas por el grupo ilegal armado.
En este proceso Lagares Alamario fue condenado a 30 años de prisión por los punibles de desaparición forzada y secuestro simple agravado. El fallador le reconoció una rebaja de la mitad de la pena por haberse acogido a sentencia anticipada.
El segundo hecho delictivo fue perpetrado el 20 de febrero de 1997 en el corregimiento San José de Apartadó, donde un comando armado sacó de sus viviendas y dio muerte a los labriegos Carlos Alonso Restrepo Correa y Javier Llorente Espitia, y lesionó de gravedad a Luis Adán Pérez. Con respecto a este caso Lagares Almario, alias El Burro, fue sentenciado a 48 años de prisión por homicidio agravado y tentativa de homicidio agravado, y se le concedió una rebaja del 50 por ciento de la pena, por la terminación anticipada del proceso.