250.000 personas que salieron de sus tierras despojados por grupos armados ya regresaron a sus propiedades sostuvo ayer el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, en la Comisión Primera del Senado donde se hizo un debate de control político al programa de restitución de tierras.
Para Iragorri, se trata de una “restitución que se dio por consecuencia de la seguridad”, cuyo ritmo ha ido aumentando, pasando “de 2 víctimas restituidas diariamente a 5 víctimas”.
El senador Armando Benedetti, del Partido Social de Unidad Nacional (La U), citante al debate, sostuvo que “tengo unas estadísticas que cuando se habla de las 74.161 solicitudes que han llegado, que es solo el 20 por ciento de las 360.000 que nos dijeron a nosotros”, recordando que en las actas del Congreso siempre se habló de 6 millones de hectáreas y de 360.000 reclamaciones, lo implica, según sus cuentas, que al ritmo que van hoy se necesitarían 500 años para restituir los seis millones de hectáreas que se prometieron.
El ministro Iragorri precisó al congresista, explicando que “nos queda un universo de personas que podrían presentar demandas de restitución de tierras. Yo no creo que después de tres años de aplicación de la ley el resto de personas no presenten las demandas. Hay 72.000 solicitudes. No puede haber más de cien mil, porque no las hay”.
Iragorri recordó que hay oficinas en todas las zonas del país donde se han presentado la violencia.
“En mi concepto el 30 por ciento de los reclamantes han resultado falsas víctimas”, dijo el alto funcionario, anotando que hay abogados que han conformado oficinas para reclamar predios y les cobran a las víctimas.
En el debate, el senador Alfredo Rangel, del Centro Democrático, aseguró que para restituir a las 360.000 familias durarían unos 300 años y no 500 como aseguró Benedetti.
“Se dijo en alguna oportunidad que esta ley es la ley de la paz y que como el problema de la tierra ha sido el origen del conflicto, solucionando el problema de la tierra se acabara el conflicto. Entonces eso quiere que nos vamos a demorar 300 años en acabar el conflicto”, indicó Rangel, quien le sugirió al Gobierno que si se tienen que reajustar las metas y las políticas, el congreso está presto a ayudar en dicha misión.
Para el senador Jaime Amín, también del Centro Democrático, otro de los problemas es que las defensorías y personerías no están dando abasto con las reclamaciones, por ello el congresista solicitó evaluar el mecanismo.
Eduardo Enríquez, del Partido Conservador, recordó que “el Estado hace una propuesta de 20 millones por víctimas y si nosotros multiplicamos por 6 millones dan 120 billones” de pesos.
El senador liberal Horacio Serpa manifestó que se tiene que rescatar que el gobierno quiere seguir avanzando en el tema de la tierra, “este es un tema que se tocó en la Habana, allá se tocan temas, no hay que tenerle miedo, es que estamos tratando de evitar que se acabe esta hecatombe que ha ocurrido en medio siglo, entonces me parece que el punto de reforma rural integral es muy valioso”.