“Es un escándalo que un niño muera por desnutrición, que un niño muera de hambre”, con estas palabras el procurador general de la Nación, Alejandro Ordóñez Maldonado, manifestó hoy en Pereira su rechazo e indignación frente a la grave situación que vive la población más vulnerable en el departamento de La Guajira y en otras regiones del país.

En su intervención de presentación de la estrategia '100 y más advertencias para una exitosa administración territorial', el procurador de los colombianos sentenció que “la responsable de la muerte de los niños wayuú es la omisión del Estado” y expresó una autoreflexión al señalar que también “fallamos los organismos de control, que no hemos tomado decisiones prontas frente a esta situación”.

En ese sentido, el jefe del órgano de control informó a la opinión pública que la Procuraduría General de la Nación adelanta en la actualidad 145 investigaciones por presuntas irregularidades en el Programa de Alimentación Escolar (PAE) y más de 11 procesos por casos de desnutrición de menores de edad y omisiones administrativas.    

Fortalecer la institucionalidad en lo referente a la atención de la infancia, cumplir las promesas estatales hechas a la población más vulnerable y asumir de forma inmediata las medidas para evitar más muertes de niños por desnutrición, algunas de las tareas a emprender para proteger a los más vulnerables, resaltó el procurador.  

"El Estado requiere de una política pública que reconozca esta problemática para lograr afrontarla y tener una solución adecuada y pronta”.