Las autoridades chinas temen que unas 100 personas hayan quedado sepultadas por un deslizamiento de terreno este sábado en un pueblo de la provincia de Sichuan en el suroeste de China.
Unas 40 casas de la localidad de Xinmo situada en esa provincia fueron cubiertas por el alud de rocas y tierra que se desmoronó por la ladera de una montaña adyacente, afectando además el curso de un río, indicó la agencia estatal Xinhua. La tragedia ocurrió el sábado hacia las 06H00 locales (22H00 GMT del viernes).
Una operación de socorro en respuesta a este "catastrófico desastre geológico de primera categoría" estaba en curso, precisaron responsables locales citados por la agencia, agregando que de momento se desconoce la dimensión exacta del siniestro.
El reporte de Xinhua precisa que "parte de la montaña" tibetana adyacente en la prefectura de Aba había colapsado.
La televisión nacional CCTV mostró imágenes en directo de policías y habitantes del lugar vestidos con impermeables y parados sobre enormes bloques de roca gris, mientras excavadoras intentaban despejar escombros.
"Son decenas de toneladas de roca, estimó Chen Tiebo, capitán de la policía autónoma tibetana y qiang de Aba.
Confirmó que las lluvias de los últimos días provocaron el corrimiento de parte de la montaña.
"Estamos en una zona sísmica, no hay mucha vegetación", destacó Chen. Los árboles pueden en cambio contribuir a absorber el exceso de lluvia y prevenir los aludes.
Unos 500 socorristas están trabajando en el lugar, mientras otros se encaminaban hacia la zona del siniestro para sumarse a las operaciones, precisó CCTV.
Un sobreviviente fue localizado "pero sus signos de vida son débiles", dijo en directo a la televisión Wang Yongbo, un responsable local de las operaciones de socorro.
"Se trata del deslizamiento de terreno más importante que se produjo aquí desde el sismo de Wenchuan", agregó.
Aludes frecuentes
Cuarta provincia más poblada de China con 80 millones de habitantes, Sichuan, lindera con la meseta tibetana, fue devastada en mayo de 2008 por un sismo de dimensiones históricas. Dejó 87.000 muertes en la región de Wenchuan, situada a escasas decenas de kilómetros del pueblo afectado este sábado.
Los aludes constituyen un peligro frecuente en las zonas rurales y montañosas de China, especialmente durante la temporada de lluvias.
Por lo menos 12 personas perecieron en enero pasado cuando un alud arrasó un hotel de la provincia de Hubei (centro).
En octubre, corrimientos de tierra afectaron al este de China como consecuencia de las lluvias torrenciales acarreadas por el tifón Megi, causando devastación a gran escala y matando a ocho personas.
Más de 70 murieron por un deslizamiento en el centro comercial de Shenzhen en diciembre de 2015, causado por la acumulación inapropiada de basura.
Los corrimientos más mortíferos en la última década en el mundo ocurrieron en 2013 provocados por lluvias torrenciales del monzón y dejaron casi 6.000 muertos.
En 2011, inundaciones y deslizamientos de tierra, debidos a intensas lluvias, devastaron la región montañosa cercana a Rio de Janeiro (sureste), causando más de 800 muertos y cientos de desaparecidos.