Poco más de 2000 familias de los corregimientos Campo Alegre, San Mateo, San Luis, Orejera, Fundación y Pampanilla, del municipio Sucre, en el departamento homónimo, están atravesando una situación crítica por cuenta del fenómeno El Niño, pues el fuerte verano secó en un 90% la Ciénaga Grande, de la cual sus habitantes se surten de agua para sus actividades diarias y obtienen su sustento con la pesca.
"Lo que está ocurriendo en la Ciénaga Grande es un hecho sin precedentes para esa población, la cual forma parte de La Mojana, pues además de que representa un peligro para el ecosistema de la zona, está poniendo en riesgo la subsistencia de quienes dependen y se abastecen de ella”, señala el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.
Funcionarios especializados de la Defensoría del Pueblo hicieron un recorrido por la Ciénaga Grande y sus inmediaciones. En el lugar corroboraron la afectación de derechos en la que están inmersos los pobladores de los seis corregimientos.
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En la visita defensorial, además, evidenciaron que son aproximadamente 2000 pescadores carnetizados y no carnetizados los afectados por el desecamiento del gran espejo de agua, que limita con el departamento de Bolívar, información que concordaría con la que maneja la Alcaldía municipal.
Es tan preocupante la sequía del cuerpo lagunar, que miles de peces murieron a causa del actual fenómeno climático, que igualmente afecta a municipios vecinos de Bolívar. “Los derechos económicos, sociales, culturales, ambientales, a la alimentación, a la salud, entre otros, de un gran número de comunidades están siendo vulnerados con los efectos de El Niño no solo en Sucre, también en otros territorios del país”, expresa Carlos Camargo Assis.
Ante la situación, que ya prendió las alarmas a nivel nacional, el Defensor hace un llamado: “El Ministerio de Agricultura, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca y todos los entes gubernamentales del orden nacional y territorial competentes deben efectuar, con urgencia, planes y estrategias que mitiguen la emergencia en la Ciénaga Grande y en otras zonas donde los cuerpos de agua están enfrentados a la misma problemática”.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), los episodios climáticos extremos tendrán un impacto negativo en la disponibilidad de alimentos, en su acceso, estabilidad y utilización, lo que, si no se adoptan medidas efectivas, dejaría sin medios de subsistencia al 78% de las personas en condiciones de pobreza y pobreza extrema que residen en zonas rurales y suelen depender de la agricultura, la silvicultura y la pesca para sobrevivir.
"Lo dicho por la FAO también es para Colombia, motivo que aprovechamos para instar al Gobierno Nacional a implementar acciones que permitan solucionar en el corto, mediano y largo plazo la problemática en Sucre y otras regiones del territorio colombiano. Es imperativo viabilizar medios alternativos de subsistencia y proteger los derechos de sus habitantes, máxime que miles de ellos están en el completo abandono estatal", puntualizó el Defensor del Pueblo.