El medio ambiente en las campañas políticas | El Nuevo Siglo
Foto AFP
Domingo, 3 de Diciembre de 2017
Alvaro Sánchez

“Candidatos deben asesorarse bien sobre este vital tema”

Tal y como lo he manifestado en ocasiones anteriores, el tema ambiental se ha ido convirtiendo poco a poco en una bandera de las campañas políticas; algunas veces sin ningún fundamento técnico o sin conocimientos suficientes del área y otras con algún tipo de sustento científico, pero quizá siempre con el factor común de las buenas intenciones. Sin embargo, es importante recordar el viejo adagio que reza “El camino del infierno está plagado de buenas intenciones”; y tratar de rescatar lo rescatable y hacer pedagogía sobre propuestas atractivas pero demagógicas e imposibles de llevar a la práctica o francamente dañinas para el desarrollo del país.

Es importante entender que el tema ambiental mueve pasiones y genera movimientos de masas de igual forma que el fútbol, la religión o la política; solamente que con la gran diferencia de que en este caso la opinión de las masas no tiene nada que ver con la realidad del comportamiento de la naturaleza, éste es independiente y no cambia con los vaivenes de la política y mucho menos con los de la política menuda.

Se oyen planteamientos como el de la senadora Claudia López quien asevera que en su gobierno se garantizará que la energía tendrá solamente origen en fuentes limpias y se acabará con el uso de los combustibles fósiles. Al ser preguntada sobre las energías “limpias” se refiere a la energía hidráulica, la energía eólica, la energía solar y la energía geotérmica. Veamos qué tan posible es cumplir con esta promesa y cuales serían las posibles consecuencias de esto.

  1. La energía hidráulica, que es quizá la más utilizada en Colombia, genera algunos impactos en los ecosistemas circundantes de su producción; pero eso sería lo menos grave, el problema de fondo es que los comportamientos climáticos variables hacen cada vez más difícil producir este tipo de energía sin necesidad de los embalses que deterioran los ecosistemas.
  2. En varios países de Europa se ha venido limitando la producción de energía eólica dado el daño que esta causando en algunas poblaciones de aves, pero el problema para Colombia no radica ahí, radica en que no hay sitios con suficientes vientos permanentes para generar alguna energía significativa en el contexto nacional. Baste leer las cifras de pérdidas de Empresas Públicas de Medellín en su planta de generación eólica de la guajira, para entender la dificultad que significaría depender de esta fuente de generación.
  3. El planeta sigue avanzando en la producción de energía solar, pero aún hoy el problema de contaminación de los paneles solares es insoluble; mientras el país no tenga mecanismos eficientes de control sobre este tipo de residuos es muy posible que los daños colaterales futuros sean de un tamaño inmensamente grande.
  4. Las posibilidades reales de nuestro país de generar energía geotérmica son tan escasas que no vale la pena entrar a considerar esta fuente como una alternativa seria en el mediano plazo.

No hago mención de el daño que se generaría al país acabando con la producción de petróleo o con la explotación de carbón, no solo por el impacto en el PIB sino por la pérdida de empleos a lo largo y ancho del país; Colombia no solo es productor de petróleo, sino que además es el país con mayores reservas probadas de carbón en Latinoamérica y uno de los mayores del mundo.

Debo decir que este es solo un ejemplo de muchos que hoy se están viendo en las campañas políticas, responsablemente los candidatos deberían asesorarse con conocedores técnicos del tema y proponer sobre temas sensibles tales como; el control ambiental, la vigilancia del patrimonio ecológico, la educación ambiental y el funcionamiento de las CARS, entre otros muchos.

alsanchez2006@yahoo.es

@alvaro080255