El defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret Mosquera, le transmitió al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, “la preocupación que tengo por la repercusión que puede tener en las zonas de frontera la crisis humanitaria que padece Venezuela y su impacto ante el flujo migratorio proveniente desde el vecino país”.

“Quiero hacer un llamado a la Defensoría del Pueblo de Venezuela para que active todos sus canales de atención de la población venezolana y que la figura del Defensor se vuelva esencial para una salida pacífica en medio de la confrontación que vive su país”, dijo el defensor Negret Mosquera.

Durante el encuentro también se dio una mirada conjunta sobre el respeto a los DD.HH. en nuestro país. “Le he manifestado la importancia que tienen para los derechos humanos en Colombia los Acuerdos de Paz: la concreción del acuerdo con el Eln y la implementación adecuada del acuerdo con las Farc”, explicó el Defensor del Pueblo.

“Desde Ginebra reitero mi llamado al Comando Central del Eln para que libere a todos los secuestrados y así allanar el camino para un cese el fuego bilateral. Celebro que las partes reunidas en Quito estén contemplando los llamados que desde la Defensoría del Pueblo y la Iglesia Católica hemos hecho para concretar los términos de un cese el fuego y las hostilidades”, indicó Negret Mosquera.

“También le expresé al Alto Comisionado de Naciones Unidas mi preocupación por la situación de riesgo a la que se encuentran expuestos los líderes sociales y defensores de derechos humanos en Colombia. Desde hace meses vengo advirtiéndolo porque no podemos tener más víctimas en el posconflicto. Esta es nuestra oportunidad como Nación para reconciliarnos y construir paz en los territorios”, informó el Defensor del Pueblo.

Finalmente, Negret Mosquera aprovechó la oportunidad para manifestar ante la oficina del Alto Comisionado de la ONU, que la Defensoría del Pueblo es la institución nacional de derechos humanos de Colombia que, en virtud de los principios de autonomía e independencia constitucional, ejerce prioritariamente y como autoridad el mandato de velar por la promoción, divulgación y ejercicio de los derechos humanos en Colombia. El Defensor fue enfático con Al Hussein en la importancia que tiene para el ordenamiento democrático este presupuesto de la Constitución de 1991.