La Comisión Reguladora de Energía y Gas (Creg) dio a conocer la versión final de una resolución, la 101 142, que establece incentivos o cobros adicionales para los usuarios, según el ahorro que hagan o no a partir del ciclo de facturación del 15 de abril.

Este cambio en el cobro, que busca promover el ahorro de energía eléctrica como manera de hacer frente a la crisis suscitada por el bajo nivel de los embalses, ilustra la importancia de proveer a los usuarios la tecnología y data para tener conocimiento en todo momento de su consumo energético y así ayudarlos a mitigar gastos inesperados. “Hay factores que influyen en la disponibilidad de energía, como el volumen de las precipitaciones o el nivel de los embalses, sobre los que no tenemos control. Pero el nivel de consumo en los hogares y en las empresas sigue siendo la única variable bajo el control directo de los usuarios, es responsabilidad propia. Si les damos la información y la data que arroja la analítica en energía, serán los agentes de sus propias soluciones”, indica Sebastián Ruales, CEO de Bia Energy.

Con Bia Energy, comercializador digital de energía, el usuario recibe información en todo momento acerca de su consumo y le brinda al usuario la capacidad de aplicar correctivos, si identifican anomalías o picos en su consumo energético.

A través de las soluciones tecnológicas de la compañía, es posible conocer más de 32 variables energéticas por segundo. Con su incorporación de inteligencia artificial (IA) y machine learning (ML), los comercios pueden detectar y optimizar las ineficiencias en su consumo y tomar decisiones informadas cuando todavía pueden reducir el monto de la factura mensual.

Alternativas como la innovación de este comercializador, surgen como una evidencia del poder transformador de la tecnología. Mediante su aplicación, Bia puede entregar datos y análisis avanzados a los usuarios para que tengan una visión clara de su consumo de energía como lugares, horarios, áreas y espacios de mayor consumo en una compañía, ayudándoles a tomar decisiones concretas que promuevan el ahorro y la eficiencia energética.