Todos los acontecimientos nacionales generan movimientos literarios, si así pueden llamarse la publicaciones que generan lo que ha sucedido. La guerra con el Perú, que tanto conmovió a la sociedad colombiana, a la postre nos hizo perder una parte importante de la Amazonía y, gracias a Dios, por lo menos nos quedó Leticia, puerto sobre el río Amazonas que es nuestra presencia a la orilla de uno de los ríos más grandes y caudalosos de América. Pero ahí estamos presentes de lejos como recuerdo triste de la guerra que se libró con tan triste resultado para Colombia.

El famoso bogotazo que se ha dado en llamar la revuelta que se sucedió con ocasión del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán. Nunca se llegó a saber quién ordenó su muerte que partió la vida política de Colombia en dos. Uno era el país antes del asesinato de Gaitán que de no haber muerto en circunstancias tan trágicas, hubiera sido presidente del país y otros acontecimientos nacionales como por ejemplo los diez y seis años que duró la hegemonía liberal desde 1930 hasta 1946. Sigue produciendo historias y relatos que dan cuenta qué fue lo que sucedió y porqué sucedió.

Un episodio que ha conmovido a todo el país ha sido el convenio con las Farc que condujo a negociar con ellos la paz, que ha sido tan esquiva a la vida nacional en los últimos cincuenta años. El expresidente Santos se dejó sentir con el libro “Batalla por la paz” en un libro con serio ameno estilo periodístico, nos relata cómo fue el proceso que condujo a la guerrilla a dejar las armas y lo logró; pero se necesitó una decisión fuerte por parte de Santos que los de las Farc atendieron, fue necesario apelar a países amigos Noruega, Venezuela, Cuba, Chile y Panamá para darle forma seria a las negociaciones.

Uno de los temas claves que relata Santos fue el de cambiarle denominación a los alzados en armas y decir que se trató de un conflicto que podía ser manejado bajo normas internacionales que se ocupan de estos asuntos. La otra manifestación literaria conocida es el libro que escribió Humberto De la Calle denominado “Revelaciones al final de una guerra” Es otro testimonio de quién por encargo del gobierno se dedicó a conversar con los guerrilleros con el objeto de conseguir de ellos que dejaran las armas y trataran de poner en práctica sus ideas políticas, no por la vía armada sino por la vía que nuestra democracia ofrece y está a disposición de todos los colombianos.

No fue fácil según los relatos del libro, escrito con una modalidad como de profesor de una asignatura la cual es, en este libro, todo lo que tiene que ver con un proceso que cambió totalmente la manera de enfrentar este conflicto; dejando de ser considerados sus autores como de bandidos que querían tomarse el poder con las armas en la mano que se transformó en un partido político actuante.