Lorena Rubiano Fajardo | El Nuevo Siglo
Lunes, 27 de Junio de 2016

La paz para todos

La paz hace riqueza; la riqueza, soberbia; la soberbia trae la guerra; la guerra la miseria; la miseria, la humildad; y la humildad hace de nuevo la paz.

Geller von Keysersberg

“La paz es entre todos, con todos y para todos”

A LO HECHO PECHO. Ya el fin del conflicto armado en Colombia con las Farc es un hecho. Y así debemos aceptarlo, Otra cosa es desmenuzar los acuerdos y expresar nuestras conformidades o inconformidades con lo acordado en La Habana y eso solo lo sabremos cuando conozcamos los textos definitivos.

Independientemente de quien la haya logrado y a qué costo, hay que reconocer los esfuerzos del presidente Santos para alcanzar y dar los pasos hasta ahora logrados en esa dirección.

Falta mucho por recorrer y el camino será espinoso, pero bien vale la pena hacer el esfuerzo y buscar el horizonte pacifista para llegar a él.

Entonces insisto en que hay que desarmar los espíritus, responder  las explicaciones pedidas por muchos sectores de la opinión pública, especialmente del Centro Democrático que orienta el presidente Uribe, que ha venido expresando sus críticas tanto en el Congreso como en los medios de comunicación.

La paz es entre todos, con todos y para todos, no es exclusiva del Gobierno y de sus seguidores. Si quieren de  verdad una paz duradera, estable y segura para todos los colombianos tienen que abrir sus corazones  y bajar el tono a sus críticas a la oposición.

Los que debemos apropiarnos de la paz y el posconflicto somos los jóvenes que no hemos vivido un solo día en tranquilidad y sosiego en nuestras veredas. Somos los campesinos los que más hemos sufrido en carne propia este flagelo y las atrocidades de la guerra.

El país, más pronto que tarde, tendrá que reconocer los esfuerzos de un hombre incansable en esta lucha por lograr la pacificación del país  como lo es el ex constituyente Álvaro Leyva Duran,  quien silenciosamente, sin protagonismos, estuvo siempre ahí, aportando ideas, mediando y buscando acercamientos.

Ojala el Gobierno lo escuche y le permita mediar con otros sectores políticos que no están de acuerdo con lo pactado en La Habana, porque estoy segura que con sus buenos oficios lograra explicar con absoluta claridad, los alcances de lo convenido en la Habana.

Entonces como jóvenes, somos los encargados de esta nueva etapa del país, no tenemos odios, no queremos más muertos, estamos en la obligación de trabajar por el país para buscar y mejorar resultados económicos y sociales y poder vivir tranquilos.

 lorenarubianof@gmail.com