Iniciativa fue radicada hace cinco meses, ahora Comisión Primera se apresta a darle debate

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En su última semana de sesiones del primer periodo de esta legislatura la Comisión Primera del Senado de la República tiene agendado en el orden del día de mañana  dar debate al proyecto de ley por medio de la cual se fortalece el ejercicio funcional de las personerías municipales. La iniciativa hace cerca de cinco meses que fue radicada sin que se le haya dado trámite, a pesar de que hay diagnósticos sobre la necesidad de robustecer esta representación del Ministerio Público en el territorio de cara al posconflicto que ya vive el país.

Precisamente hace pocos días el director Ejecutivo de la Federación Nacional de Personeros de Colombia (Fenalper), Camilo Fonseca, manifestó a EL NUEVO SIGLO su preocupación porque esta iniciativa “no ha avanzado en el Congreso, está en la Comisión Primera del Senado, básicamente por el fast track. Pero la idea es seguir avanzando con el proyecto en el próximo periodo de esta legislatura”.

No obstante se espera que el próximo martes la Comisión Primera del Senado aborde la discusión de esta iniciativa en primer debate. De lo contrario este asunto se quedaría para marzo próximo, cuando el Parlamento regrese a sesiones para cerrar la legislatura, pero la posibilidad de que sea discutida se verá reducida porque se encontrará con los congresistas pendientes más de las elecciones presidenciales que de legislar.

Preocupaciones

Las personerías de todo el país  se reunieron en Bogotá los días 4 y 5 de diciembre en el Encuentro Nacional “Territorios por la Paz: Un Propósito Nacional”, en el cual se analizó el proceso de implementación de los acuerdos de paz en los territorios y los retos que esto supone desde la institucionalidad.

Fonseca indicó que “evidenciamos que en la etapa de alistamiento para la implementación de los acuerdos  nunca hubo una preparación real de los territorios y sus capacidades institucionales. Por ejemplo, las personerías no fueron preparadas para atender las situaciones de derechos humanos, y el Gobierno no tiene respuestas claras, no hubo una estrategia clara por parte del Estado colombiano para llegar con servicios esenciales como infraestructura, servicios públicos, seguridad, salud y educación en esta etapa”.

Otra de las conclusiones que dejó esta cumbre es que existen serias preocupaciones por las realidades territoriales desde que se empezó la implementación de los acuerdos, incluso algunos personeros manifestaron que temen que este proceso no tenga un fin exitoso. Así mismo expresaron que en algunos municipios la violencia no se redujo y que por el contrario ha existido un incremento de la misma y aparición de nuevos grupos armados.

 Karina García, personera de Suárez, Cauca, manifestó su preocupación  por el incrementó de violencia en su municipio y por el temor que vive la comunidad de que se repitan los enfrentamientos que los afectaron en el pasado. “Los guerrilleros de las Farc siguen operando en la zona pero identificados como Epl,  los comandantes siguen siendo los mismos, además tenemos presencia de Eln y se está gestando un nuevo grupo paramilitar”. La Personera agregó que estos grupos tienen armamento largo y moderno que ha sido analizado en consejos de seguridad y ni siquiera el ejército nacional posee.

 Óscar Mosquera, personero de Cértegui, Chocó, habló de la llegada de otros grupos al margen de la ley en lugar de las Farc, lo que le ha impedido a la región sentir un cambio significativo.

“Sigue siendo una situación bastante compleja porque las zonas que fueron desocupadas por las Farc ahora han sido nuevamente copadas por otro tipo de grupos armados como bandas criminales, Eln y disidentes, entonces sigue existiendo una violación a los derechos humanos de todas las poblaciones de esta región”, dijo Mosquera, quien considera pertinente que haya un mayor control por parte del Gobierno en territorios a los que aún nadie ha tenido en cuenta.

En tanto que Fonseca señaló que lo que se acordó parece que no tuviera en cuenta lo que realmente sucede en los territorios. Los personeros no logran percibir como positivo lo que está pasando con la implementación, denuncian aumento de cultivos de coca, presión a las comunidades para movilizarse, presencia de nuevos grupos armados, “lo que nos indica que el problema del país no era la presencia de la guerrilla sino la falta de presencia del Estado en los territorios para generar desarrollo, llegar con seguridad, con servicios públicos, etcétera”, dijo.