Luego de que se conociera que el exviceministro de Transporte, Gabriel García Morale, pagará 5 años de cárcel y no 10 como estaba anteriormente la condena, las alarmas se encendieron para el fiscal general de la Nación, Néstor Humberto Martínez.

El jefe del ente acusador manifestó que ese tipo de rebaja de penas y beneficios constituyen un “remedo de justicia” que no van a doblegar la corrupción que tiene hoy el país.

“Yo comparto el descontento de la opinión pública, este sistema de penas y de beneficios son un remedo de justicia y no vamos a poder acabar la corrupción con las penas actuales. Luego no podemos sorprendernos, esas son las leyes vigentes”, dijo el fiscal.

Ayer se conoció que García Morales aceptó los delitos por cohecho e interés indebido en la celebración de contratos, lo que le permitió que se rebajara su pena.

Las investigaciones contra el exfuncionario tienen que ver con los hechos cometidos en 2009 cuando Morales recibió millonarios sobornos de la constructora brasileña para que en su función de  director encargado del Instituto Nacional de Concesiones (INCO) –hoy Agencia Nacional de Infraestructura–, direccionara la adjudicación del contrato de Ruta del Sol II.

Lea también: Odebrecht: 5 años de cárcel para García Morales