Continuación | El Nuevo Siglo
Sábado, 2 de Diciembre de 2017

“Existencia de dos mundos es reiterada a lo largo de la historia”

Se destacaron, en “Planteo” (octubre 21), aspectos que llamaron la atención en el estudio de El Choque de Civilizaciones y la Reconfiguración del Orden Mundial (Paidós, Barcelona, 1997) de Samuel P. Huntington; prosigue el análisis y el aporte del autor se expone en el orden y terminología por él concebidos.

El mayor peligro de la política global reside en un eventual conflicto entre grupos de civilizaciones diferentes, no entre naciones-Estado, lo cual exige un orden mundial basado en civilizaciones. Las pautas de cohesión, desintegración y conflictos, en el ángulo mundial, son dadas por factores culturales coincidentes y no coincidentes. No hay tendencia a la civilización universal y Occidente no pudo imponerse, a la larga, a las sociedades no occidentales. Los oponentes mayores de Occidente son el Islam y China al cesar la existencia de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). La supervivencia de Occidente depende de USA, pese a que Europa Occidental ya no es área de contiendas bélicas pero Trump es una incógnita. La rivalidad de las superpotencias es reemplazada por el choque de civilizaciones ¿son compatibles la cultura islámica y la democracia? Occidente está en decadencia pese a su poder.

Francis Fukuyama  pronosticó la universalización de la democracia liberal y el cese de conflictos planetarios: son paradigmas fallidos. La existencia de dos mundos es reiterada a lo largo de la historia: Oriente y Occidente, norte y sur, centro y periferia pero la situación es demasiado compleja para la vigencia de la tendencia bipolar. Disminuye la probabilidad de conflictos bélicos que persisten solo entre las naciones pobres y son reemplazados por los  comerciales entre los países ricos.  Los organismos internacionales han asumido importantes funciones antes a cargo de los Estados.  El mundo está inmerso en procesos simultáneos de fragmentación e integración. La validez de los paradigmas depende de la medida en que sus predicciones se cumplen. Australia y Nueva Zelanda están emparentadas con Occidente. El budismo no ha sido base de una gran civilización. Los pueblos europeos lucharon entre sí: la paz era la excepción y no la regla. El Estado Universal Occidental no había culminado a fines del siglo XX. Los Estados Universales anteriores fueron imperios. El naciente Estado Universal Occidental era un conjunto de federaciones, confederaciones y organismos internacionales.