La salud en Colombia debe ser objeto de una profunda reforma que redireccione los recursos, sea un sistema único y acabar con la confusión de normas, pues con lo que hay en la actualidad los únicos que ganan son los corruptos.

Así lo expresó el presidente de la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas ACHC, Juan Carlos Giraldo, quien señaló que sumado a lo anterior para 2017 se tiene un presupuesto desbalanceado y que quiere ser equilibrado con recursos de la reforma tributaria que cursa trámite en el Congreso de la República.

Para el dirigente la clave de la reforma estructural de la salud es sin duda la tenencia del dinero.

Señaló que se debe crear la figura de un banco o caja única para la salud, la que se encargaría de recaudar todos los dineros que nutren el sistema y pagaría directamente a quienes presten los servicios.

De esta forma, sostuvo Giraldo, se evita que por falta de pago o contrato no se atienda a los usuarios. La función de este organismo sería la de preservar el dinero de la salud evitando el mal uso de los recursos.

En esta reforma estructural, señaló el directivo, el eje debe ser el paciente, la prevención, este es un tema que hay que hacerlo atractivo, hay que contar con redes integradas que faciliten la atención y cambiar el papel de las EPS bajo un esquema de administración regulada y que estas entidades no manejen dinero.

Crisis en EPS

Giraldo dijo que el sector salud sigue en crisis, las Empresas Promotoras de Salud, EPS, siguen en problemas financieros y pronosticó que si no se toman medidas oportunas se verán afectados millones de usuarios en todo el país.

El directivo dijo que EPS como Cafesalud, Coomeva, Capital Salud y Savia Salud se encuentran en serios problemas financieros, lo que lastima la atención de sus usuarios.

En el caso de Coomeva señaló que hay un déficit de $1,3 billones y se encuentra en vigilancia especial por parte de la Superintendencia de Salud.

Dijo que hay soluciones para este problema como la conformación de un grupo empresarial que respalde a la entidad. Otras empresas de Coomeva son sólidas y están fuertes financieramente.

Otra de las entidades que tiene serios inconvenientes para la prestación de los servicios es Capital Salud, una empresa surgida hace varios años con recursos del Distrito Capital y que hoy se encuentra en una crisis que muestra un déficit cercano a los $600 mil millones, con deudas por $77 mil millones y cuenta con algo más de 1,2 millones de afiliados.

El caso de Savia Salud es alarmante. Esta empresa que es propiedad de la gobernación de Antioquia, la alcaldía de Medellín y la caja de compensación familiar Comfama, se encuentra en vigilancia especial por parte de la Supersalud. Tiene una deuda superior a los $476 mil millones y la cartera vencida supera el 63%.

Savia Salud pierde al mes cerca de $12.800 millones, algo más de $400 millones diarios.

Por lo anterior, el directivo exigió de la Supersalud acciones y decisiones que garanticen la prestación de los servicios a los millones de colombianos que se ven afectados por la situación.

Señaló Giraldo que hay EPS que son ejemplo de gestión, y que es una muestra de que las cosas se pueden hacer bien, con transparencia y honestidad. Por eso, dijo la reforma estructural de la salud debe quitar el manejo del dinero a las EPS y pasarlo a una caja general que gire por servicios prestados.

Reclamó fortaleza de las entidades de control para evitar que los corruptos sean los que manejan los recursos para la salud.

El presidente de ACHC sostuvo que el modelo de aseguramiento fracasó, pues no se trabajó en prevención  y la gente hoy está enferma y los costos obviamente son más altos.