En medio de la entrega de la obra del cruce de la Cordillera Central en Cajamarca (Tolima), el presidente Iván Duque se refirió duramente contra los resultados que dejaron las elecciones regionales en Venezuela realizadas el pasado domingo, calificándolas como una “farsa y una patraña”.
“Una vez más sigue capturando el poder regional, esa es una farsa, una patraña, por eso el único camino viable para Venezuela es una elección presidencial creíble, con una supervisión minuciosa de la comunidad internacional y que ojalá pase rápido”, expresó el Jefe de Estado.
Además, Duque señaló que “lo que vimos ayer, no solamente es una demostración de un fraude ostensible, sino que también vemos a muchos de los que le apostaron con confianza a que se podía registrar un proceso electoral serio, hoy también están hablando de cómo se robaron las elecciones”.
Asimismo, el mandatario señaló que la victoria del régimen sobre la oposición era una “crónica de un fraude anunciado” e indicó que si no se llega a tener esta elección presidencial creíble, “solo habrá más crisis migratoria y pobreza, esto mientras el régimen de Maduro siga en el poder”, sostuvo.
“Es una crónica de un fraude anunciado, una vez más para lo mismo, una elección manipulada, por un régimen que controla absolutamente todo, que se queda con todo, que tiene el control del poder judicial, que tiene el poder electoral, que acabó con la iniciativa privada”, aseguró.
El resumen de la jornada electoral
De acuerdo con el informe presentado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) del vecino país, con 90,21% de los votos escrutados, se detalló que el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ganó en 20 de los 23 estados que hay en territorio venezolano, incluyendo la Alcaldía de Caracas, con el 58,93% de las mesas escrutadas.
Mientras que la oposición solo triunfó en tres estados, uno de ellos fue Zulia, el más poblado del país, donde participó el 41,8% de la población. Esta marca podría superar el registro en 2017, cuando el régimen obtuvo 18 de los 23 estados del país, además de Caracas.
La jornada se llevó a cabo entre críticas por las irregularidades en los centros habilitados para sufragar y la expectativa porque una parte de la oposición volvió a las urnas tras años de boicot y llamados a la abstención. A estos comicios estuvieron convocados unos 21 millones de ciudadanos venezolanos. Así mismo, en esta jornada se debían seleccionar 23 gobernadores y 335 alcaldes, así como legisladores regionales y municipales, entre más de 70 mil candidatos.
Le puede interesar: Externado confirma plagio en tesis de Jennifer Arias
Durante el evento, el líder de oposición, Henrique Capriles, denunció que en algunos puntos se seguían operando las votaciones, pese a que estaba pautado que se cerraban a las seis de la tarde, lo que daría pie a sospechar de un posible fraude electoral.
“Se está dando una situación irregular en casi todo el territorio nacional. A las 6:00 p.m. los centros electorales en el país que no tuvieran votantes en cola, atención a la misión electoral, lo que corresponde es cerrarlo. Pero el señor Maduro, que tiene control sobre la instituciones del Estado, ordenó a las 6:20 p.m. una operación remate”, escribió el dirigente venezolano en su cuenta de Twitter.
Sin embargo, el presidente Nicolás Maduro resaltó la participación de los observadores de la Unión Europea durante los comicios electorales del domingo. “Hasta el día de hoy se han portado a la altura, respetando la Constitución y las leyes, ojalá sea así hasta el final de su misión de veeduría, ojalá sea así, lo deseo de verdad, sinceramente”, mencionó.
Cabe destacar que esta comitiva de 130 personas no trabajaba en una elección en Venezuela desde hacía 15 años, pues las autoridades venezolanas optaron por "misiones de acompañamiento" de países y organizaciones cercanas al chavismo. De igual manera, también se contó con la presencia de expertos de las Naciones Unidas y el Centro Carter. Se espera que en el día de mañana, la UE presente un informe sobre lo acontecido en las elecciones del vecino país.