A mí me molesta que se molesten los que menos se tienen que molestar.  Pero, claro, de eso se trata la Revolución, de cambiarlo todo, desde el lenguaje hasta las tradiciones y costumbres, no solamente los gobiernos y sus políticas. Como en Francia, en 1789, donde no dejaron títere con cabeza y lo arrasaron todo para servirle en bandeja de plata la tiranía militar a Napoleón. Y lo que se hizo en La Habana fue, ciertamente, toda una revolución, así no queramos reconocerlo.

Por eso me molesta que los ex terroristas del M-19 o de las Farc se molesten cuando se les recuerda la verdad: que fueron terroristas, que su condición de asesinos es ontológica y etimológicamente invariable; que el daño que produjeron es inconmensurable y que, a pesar de ellos y de sus creencias, existe el bien y existe el mal y, naturalmente, que ellos representan y encarnan el mal.

Pero más me molesta aún que quienes los apoyaron en su lucha terrorista por omisión, al no sentenciar y enjuiciar con ímpetu democrático sus deleznables conductas, ahora se molesten y se rasguen las vestiduras porque ellos, -como sucedió con los de la UP o los del M 19-, entren a la política sin siquiera purgar condena.

Lo advertimos y nos dijeron mentirosos y guerreristas. Bastaba con leer los acuerdos para saber que eso iba a sucederse. Como también se sabe que lo harán con éxito en las jurisdicciones especiales en donde se prohibió participar a los partidos democráticos; o con las curules por derecho propio o, que podrán comprar votos con los ingentes dineros de sus actividades criminales nunca declarados, nunca devueltos o, con los miles de millones que reciben de nuestros impuestos por ser un nuevo partido político etc…

Ahora muchos miembros del liberalismo, algunos del partido de la U y casi todos los de Cambio Radical se rasgan las vestiduras y, penosamente, ad portas de las elecciones se sienten indignados, consternados y hasta ultrajados.

En eso consistía ese acuerdo de La Habana entre el Gobierno y la guerrilla. En eso y en miles de cosas más que se nos vendrán encima y sobre las cuales no es tiempo para arrepentimientos políticos, judiciales o periodísticos.

Le hicieron conejo al pueblo colombiano el 2 de octubre de 2016, ¿Ahora quieren hacérselo a los de las Farc?

 *Miembro de la Corporación Pensamiento Siglo XXI.

@rpombocajiao