Ante un juez de control de garantías, la Fiscalía le imputó al exdirector de Conalvías Andrés Jaramillo López el delito de lavado de activos, por los hechos que rodearon los contratos de construcción de la Fase III de Transmilenio en el año 2007.

El fiscal delegado en este proceso judicial advirtió que la imputación corresponde al desvío de $13 200 000 000 (trece mil doscientos millones de pesos) que hacen parte  del anticipo del contrato 138 para la culminación de las obras.

“En esta imputación estamos hablando del anticipo que corresponde a 13 mil 400 millones de pesos que pasó por Infraestructuras Urbanas, Conalvías y luego a la Fundación Bogotá un Espacio para Amar”, sostuvo el fiscal del caso.

Agregó que los dineros púbicos fueron a parar a manos de esta fundación por concepto de servicios de transporte que no se prestaron, “a los ojos de cualquier persona se constituye lavado de activos”.

Asimismo, se evidenció que en este desfalco participaron varias personas, entre ellas el representante legal de la Fundación Bogotá un Espacio para Amar, Víctor Manuel Vargas Marín, quien responde ante la justicia por los delitos de lavado activos y enriquecimiento ilícito a favor de terceros.

“Entre los dos hubo un acuerdo para que a través de la fundación se desviara el dinero que debió ser utilizado para el anticipo del contrato y no para sustraérselo”, agregó.

Según la imputación Jaramillo López habría hecho 15 giros en cheque a la Fundación Bogotá un Espacio para Amar, al amparo de  cuentas de cobro fraudulentas.

Por este delito el exdirectivo de Conalvías se declaró inocente.