Varios son los hechos políticos que marcarán las elecciones presidenciales de 2022 comenzando por la realidad constitucional de que no habrá reelección, pues esta posibilidad fue abolida vía acto legislativo con la llamada reforma de Equilibro de Poderes de 2015.
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Pero, además, y así existiera esa alternativa, el propio mandatario dijo desde antes de posesionarse que entre sus planes no está pensar en un segundo mandato.
Otro hecho político que marcará esta elección es que, a juzgar por las más recientes encuestas, cuando ya el sol cae sobre las espaldas de la administración Duque aún no es claro quién será el candidato uribista, como tampoco hay pistas que apunten a quién será ‘el que diga Uribe’.
Esto, en razón de que el exmandatario de la ‘Mano firme y el corazón grande’ enfrenta dos situaciones que afectan su popularidad. De una parte, el proceso penal que afronta en la Fiscalía General de la Nación por supuesta manipulación de testigos y que le valió, incluso, permanecer dos meses en detención domiciliaria, y por otra parte las constantes peleas con la oposición política. Estas dos circunstancias han minado su prestigio al punto de que él mismo admite que lo “entristece el deterioro de mi reputación”.
Y un tercer hecho político, más prominente aún es que la campaña para 2022 arrancó hace cuatro años, exactamente el 27 de mayo de 2018, cuando el hoy Presidente de la República pasó a segunda vuelta con Gustavo Petro.
En ese momento, el exgobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, no solo agradeció los 4’584.566 votos que lo posicionaron como tercera fuerza electoral del país sino que anunció “seguiré trabajando por Colombia”.
Para muchos, ese fue el ‘banderazo’ de la carrera por el solio de Bolívar que hoy ya tiene más de 20 nombres en el sonajero de candidatos y precandidatos.
Fajardo, como era de esperarse, ha seguido manteniendo contacto en las regiones con su electorado y con los medios de comunicación, mientras que Petro, senador por cuenta de la reforma constitucional de 2015, hoy ocupa un escaño en el Senado de la República pero se da por descontada su participación en los comicios de 2022.
A ellos los acompañan otros dirigentes que púbicamente ya anunciaron sus aspiraciones. Vale decir, el senador escindido del Polo Democrático Jorge Enrique Robledo, quien lleva ya más de un año en campaña y hace poco fundó su propio movimiento ‘Dignidad’ para seguir como independiente y, eventualmente, participar de una consulta interpartidista de la centro-izquierda.
Alianza Verde
Entre los que también han dicho abiertamente que quieren hacerse contar por la Casa de Nariño están otros nombres conocidos en el mundo político. Uno de ellos es el senador Iván Marulanda quien hace pocas semanas renunció a Compromiso Ciudadano, el movimiento de Fajardo, pues aspira a ser el candidato único de la Alianza Verde.
Para lograrlo, Marulanda tendrá que enfrentarse a otros aspirantes de esa colectividad como su presidente Antonio Navarro, la senadora Sandra Ortiz y el senador Antonio Sanguino, y la misma Ángela María Robledo que ya fue fórmula de Petro hace dos años y llegó a la Cámara por la Colombia Humana, pero que ahora es objeto del galanteo de los verdes.
En esa puja verde también se mencionan al exgobernador de Nariño Camilo Romero, al senador y exministro Jorge Eduardo Londoño y el exgobernador de Boyacá Carlos Amaya.
Liberales
En algunos sectores se dice con insistencia que un buen candidato, esta vez con buena posibilidad, sería el exnegociador de Paz Humberto de la Calle Lombana, quien figura con buena imagen en las más recientes encuestas.
Claro, en la colectividad del trapo rojo también aparecen como una posibilidad el exministro estrella de Juan Manuel Santos, Alejandro Gaviria Uribe, hoy rector de la Universidad de Los Andes, y el saliente procurador General de la Nación, Fernando Carrillo Flórez, muy cercano al expresidente César Gaviria Trujillo.
Y aunque ya no pertenecen a la colectividad, pero con orígenes liberales, están el exministro del Interior Juan Fernando Cristo y el exsenador Juan Manuel Galán.
Conservadores
Por el lado de los azules la baraja también es amplia, y contando. Desde la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez, de quien se afirma renunciaría antes de inhabilitarse para aspirar a suceder a su actual jefe, hasta el exministro Mauricio Cárdenas Santamaría.
Sin embargo, quien se ve con mayor consenso es el expresidente del BID, Luis Alberto Moreno, a quien han tentado varias veces con esa posibilidad.
Cambio Radical
Tampoco se queda atrás. Se da como un hecho que su máxima figura, el exvicepresidente Germán Vargas Lleras está allanando el camino para anunciar su lanzamiento, por tercera ocasión, a la carrera presidencial.
Como él, sin que lo hayan confirmado, estarían el exalcalde de Barranquilla Álex Char, y el senador Rodrigo Lara, que esta semana anunció su retiro de Cambio Radical.
La U
Suenan varios nombres: el exsenador escindido Roy Barreras, quien viene posicionándose en medios con su propio programa en redes sociales y el referendo ‘fuera Duque’, y no se descarta que se anime también la recién elegida directora de la colectividad, Dilian Francisca Toro.
Centro Democrático
Y si de sonajero se trata, el Centro Democrático sí que puede dar fe de lo que se llama ‘baraja’. Las senadoras Paloma Valencia, María del Rosario Guerra y Paola Holguín se disputan esa dignidad junto al representante Edward Rodríguez.
Pero ninguno de ellos la tiene fácil cuando les toque competir contra pesos pesados de la colectividad como el actual ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, el embajador en Estados Unidos Francisco Santos y el exviceministro Rafael Nieto Loaiza. Habrá que esperar cuál dice Uribe.
Los cristianos
El senador y jefe de Colombia Justa Libres, John Milton Rodríguez, dijo hace dos meses que “le gustaría” participar en esa carrera de obstáculos. Por ahora no tiene competencia a la vista.
Independientes
También quieren aparecer en el tarjetón. O que lo diga la lideresa social afro del Cauca Francia Márquez, quien ha señalado en redes sociales que se postulará al Palacio de Nariño.
Lo mismo ha dicho en los últimos días el exalcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández, y su homónimo de Medellín Federico Gutiérrez a pesar de ser muy cercano al uribismo antioqueño.
Polo Democrático
Por ahora, y no pasa desapercibido, la única colectividad que no tiene precandidatos es el Polo Democrático, aunque es obvio que falta mucha agua por correr debajo del puente.