Encrucijadas | El Nuevo Siglo
Sábado, 28 de Octubre de 2017

Las principales fuerzas políticas se enfrentan a serias encrucijadas para decidir las candidaturas a la Presidencia. La proliferación de candidatos en busca de firmas de la ciudadanía parece más un acto circense que una competencia por  la máxima dignidad de la República.

El Centro Democrático sigue sin encontrar la fórmula de escogencia. Las últimas declaraciones de los 5 pre-candidatos a María Isabel Rueda (El Tiempo 22-10-17) demuestran la dimensión de la dura competencia. Y, no es claro que el seleccionado sume los respaldos de sus rivales. Las vacilaciones y demoras inesperadas en el partido de Uribe pueden costar muy caro. No es prudente sumarle incertidumbres al futuro de la nación. La arena está llena de adversarios que trataran de aprovechar las inconformidades que surgen cuando el jefe cavila. ¿Se postulará Oscar Iván Zuluaga?.

La campaña formal de Vargas Lleras ha comenzado y está bien planeada. Sus declaraciones a los medios lo colocaron en el centro de la competencia, a donde es fácil lanzar dardos. Y han sido duros y constantes. Con su conocido carácter fijó posición y se desmarcó del gobierno, especialmente de la JEP. Fue la manera de ser leal consigo mismo. Y, así, coincidió con la mayoría de los sectores de opinión. Ciertamente, estamos ante una desordenada creación de derecho público, de normas penales, que tienen asustada a la nación. La misma CPI ha manifestado su inconformidad. Y los gremios alzaran la voz. Mientras, Vargas avanza solo en su camino.

Con pragmatismo hemos afirmado que la cercanía o la oposición  al gobierno Santos no debieran determinar el futuro de colectividad azul. Pero, eso es lo que está sucediendo. Y no aparecen posibilidades de entendimiento que nos permitan hacer valer nuestra voluntad de permanencia en la historia de Colombia. Cuando se intentan acercamientos nos encontramos, por una parte, con el “inmediatismo”, que le da primacía a lo circunstancial burocrático o, por la otra, con “el angelismo”, que le da primacía solo a sus propias ideas. No se piensa con realismo. Es insensato subestimar el aporte electoral de los congresistas. Y, estos, no deben subestimar la capacidad del expresidente Andrés Pastrana de hacer campaña. También, se debe tener presente la fuerza mística de la marca “Partido Conservador”, que tiende a disminuir, según todos los analistas. Estamos en un cruce de opiniones que ha conducido a que los candidatos conservadores, como Martha Lucia Ramírez y Alejandro Ordoñez, con méritos y cauda propia, se alejen de la organización oficial y el Partido se quede sin candidatos. Candidatos sin partidos y partido sin candidato. Esa paradoja puede resultar trágica ante una contienda electoral tan incierta. Debiéramos reencontrarnos en la construcción del futuro de la patria. Insisto: unidos o simplemente reunidos, podemos armar la gran alianza de la centro-derecha colombiana. Sería un mensaje tranquilizador, esperanzador, que necesita la angustiada ciudadanía.

Una coalición así, con las fuerzas aquí mencionadas, puede responder hoy el magno interrogante de José Eusebio Caro, hace 168 años: ¿Hay algo que conservar?  “Si, hay que conservar al hombre, hay que conservar la sociedad, hay que conservar la república”… Sí, hay que conservar la Democracia, hay que preservar la ética para que regresen los instantes estelares cuando ser Congresista era un honor, cuando ser Magistrado era un honor, cuando ser funcionario público era un honor… cuando ser político era un honor…