La llegada de Petro | El Nuevo Siglo
Domingo, 1 de Enero de 2012

 

* Bogotá, foco de reparación a víctimas

* Lineamientos claves del nuevo gobierno

 

No son pocos los retos que el nuevo alcalde de Bogotá Gustavo Petro se impuso ayer al asumir las riendas de la ciudad. Aunque gran parte de los lineamientos expuestos en su discurso ya habían sido señalados en la plataforma programática con que ganó los comicios de octubre pasado, hay énfasis muy importantes para ser destacados. Uno de ellos, sin duda alguna, el papel activo que la ciudad debe tomar en el marco de la Ley de Reparación a Víctimas de la Violencia, dado que la Capital del país es la mayor receptora de centenares de miles de hombres, mujeres y niños afectados por el conflicto armado. Las estadísticas evidencian que Bogotá es el mayor foco de concentración de desplazados y despojados de sus tierras a sangre y fuego. De allí que tanto el Distrito como el Gobierno nacional tienen que diseñar una estrategia especial para localizar y convocar a ese gran cúmulo de víctimas para que puedan recibir los compensaciones e indemnizaciones que la Ley prevé y estudiar la posibilidad real de que puedan retornar a sus predios. Es necesario, pues, romper esa hipótesis que se está afincando en el imaginario popular en torno a que la reparación a víctimas, por haber sido el campo el escenario de la gran mayoría de delitos cometidos por los grupos ilegales, tiene un perfil marcadamente rural o semirural.

Igual debe destacarse la forma en que el burgomaestre expuso la política de agua como una de las prioridades de su administración, no sólo desde el punto de vista de preservación y utilización ambientalmente sostenible del recurso hídrico, o de asegurar un consumo mínimo vital para la población, sino de un nuevo marco para financiar la descontaminación del río Bogotá.

En materia de seguridad, la creación de una Secretaría que se encargue de coordinar el tema y fijar las políticas sectoriales, está acorde con los modelos de gobierno que hay en las grandes ciudades del mundo. La prohibición del porte de armas es una medida que deberá ser evaluada acorde a sus resultados en el corto plazo, más aún cuando está demostrado estadísticamente que la mayor parte de los delitos son cometidos con pistolas, revólveres y otro tipo de armas sin salvoconducto.

El reto de intervenir a fondo la Universidad Distrital es muy ambicioso y no será fácil, pero si lo logra concretar le dará a esta institución el peso específico e importancia que los claustros de educación superior locales tienen en las principales capitales del país.

De otro lado, los enunciados de Petro sobre el marco general de la nueva política de movilidad vial, que es sin duda uno de los grandes problemas de la Capital, evidencian que no habrá aquí improvisaciones y que la intermodalidad de un transporte público eficiente, rápido y, sobre todo, capaz de desincentivar el uso del vehículo privado, será el norte a seguir. De ello dependerán las medidas concretas en materia de Pico y placa, los subsidios para el transporte colectivo, los apoyos para tecnologías menos contaminantes, así como lo relativo a la primera línea de Metro, el Tren de Cercanías y el desarrollo de Transmilenio, entre otros aspectos puntuales.

En los anuncios sobre salud y nutrición e inversión social basados en esquemas tributarios progresivos, su atención estará en el modelo de implementación preciso que proponga. Igual ocurrirá con temas tan complejos como la integración de las empresas de servicios públicos, la creación de un grado más en la educación secundaria, instalación de jardines infantiles y otros programas esbozados ayer por el Mandatario.

Como se dijo al comienzo, Petro aterrizó el marco general de su plan de gobierno y ahora lo importante es que la ejecución arranque lo más pronto posible. La ciudad tiene gran expectativa por esta nueva administración y, dado que las crisis en algunos sectores urgen medidas de choque, lo mejor es responder con efectividad y eficacia funcional. Manos a la obra.