Farc pidieron perdón a comunidades de La Chinita | El Nuevo Siglo
Foto Agence France Press
Viernes, 30 de Septiembre de 2016
Redacción Nacional

Los familiares de las 35 víctimas fatales y 17 heridas del barrio La Chinita de Apartadó, Antioquia, se encontrarán con Pastor Alape y otros jefes guerrilleros para escuchar las razones de la masacre, y recibir la petición de perdón por parte de la guerrilla de las Farc.

Los jefes guerrilleros Iván Márquez y Pastor Alape fueron trasladados en un helicóptero azul de la Cruz Roja Colombiana. Allí reconocieron su responsabilidad por lo sucedido el 23 de enero de 1994 y cerraron con un acto de reconciliación.

Al acto también asistieron parte del Gobierno nacional, entre ellos Sergio Jaramillo y Humberto de la Calle, quienes arribaron al barrio La Chinita, de Apartadó, lugar en el que estuvieron reunidas las familias de las personas muertas y heridas que dejó la masacre cometida por el grupo guerrillero.

Las víctimas, que estuvieron vestidas de blanco, hicieron un recorrido por la llamada 'Calle de la Masacre', trayecto que fue  rebautizado como 'Calle de la Esperanza', y desarrollaron un ritual de sanación en la casa donde ocurrió el hecho. La reunión entre víctimas y victimarios se hizo en privado. Luego, un evento público en el coliseo del Colegio San Pedro Claver cerró el evento. Se anunció asimismo la construcción de un parque, como símbolo de reconciliación entre las Farc y las víctimas.

Entre tanto el comisionado de paz, Sergio Jaramillo, aprovechó para hacer un llamado a los miembros de las Farc que comienzan a movilizarse hacia las zonas veredales:

“Quiero darles un mensaje a los milicianos y colaboradores de las Farc: el Acuerdo les ha abierto una puerta para que ustedes puedan tener seguridad jurídica y apoyos para reintegrarse a la vida civil. No vayan a pensar ahora que pueden bajar la cabeza, quedarse como unos submarinos e irse a trabajar con otros. El miliciano que no se acoja al proceso de paz, ¡lleva! No se vayan a equivocar”.

Frente a cientos de personas provenientes de Acacías, Granada y algunas veredas de Vistahermosa, Sergio Jaramillo respondió las preguntas del público, varias de ellas que indagaban por los proyectos que, con la paz, deben venir a esta región: “Este es un proceso para terminar el conflicto y construir una paz estable y duradera, no simplemente para que las Farc entreguen su armas. La paz nos va a obligar a hacer grandes inversiones en el campo colombiano y en especial en las zonas más afectadas por el conflicto, como Vistahermosa”.

El Comisionado enfatizó la oportunidad de la paz para recuperar el Parque Nacional de La Macarena y promover proyectos silvopastoriles en las zonas de amortiguación, como se acordó en la reforma rural integral. “El cruce entre construcción de paz y recuperación del medio ambiente es una de las grandes oportunidades para Vistahermosa y para el Meta en general”, dijo el Comisionado, “habrá mucho interés de la cooperación internacional”.

El Comisionado también resaltó la importancia de trabajar en programas de convivencia, con miras a facilitar la reincorporación de las Farc a la vida civil y la desactivación de los odios en la sociedad. “Si no aceptamos al otro, no podemos construir paz”.

Las Farc también hicieron lo propio con las víctimas de la masacre en Bojayá-Chocó donde el 2 de mayo del 2002 con un cilindro-bomba que cayó dentro de la iglesia dejó casi un centenar de personas muertas y más de 6.000 desplazadas.

 El jefe de la delegación de paz de las Farc en La Habana, Luciano Marín Arango, alias ‘Iván Márquez’ realizó un discurso en la vereda La Loma de Bojayá, donde pidió el perdón de las víctimas y les entregó el Cristo afro para recordar lo sucedido.

“Pedimos que nos perdonen y nos den la esperanza del alivio espiritual permitiéndonos seguir junto a ustedes haciendo el camino que, reconciliados, nos conduzca hacia la era justa que tanto han anhelado los humildes de todos los rincones de Colombia”, indicó el delegado de Farc.