CON UN elenco de lujo, hoy termina Endry Cardeño, Brenda Hanst, Edwin Garrido, Julieth Dipietro y John Londoño la temporada de El consultorio de las señoritas, la obra de teatro que está dando de qué hablar desde el pasado 1º de septiembre en el Casino Crown Zona T.

Dirigida por Roberto Herrera y escrita por Julieth Dipietro Bravo cuenta la historia de Maruja (Endry Cardeño), una campesina guajira que perdió a su esposo e hija por culpa de la guerrilla y se ve obligada a huir para salvar su vida. Llega a  Valledupar  y para sobrevivir le saca provecho a su fama de ¨ bruja y decide montar su consultorio.

Maruja se hace pasar por cubana, junto con su amiga Juana (Brenda Hanst), se dedican a engañar y engatusar a cuanto incauto cae en sus manos, inventándole que la mazorca le mostrará su futuro. De esta forma se convierte en la reina del talk show esotérico más importante en las redes sociales y en la única en tener la capacidad de leer la mazorca. Al ser descubierta por el dueño de la casa, donde montaron el supuesto consultorio, le llegará una propuesta que la dejará de una sola pieza.

Cuando entra el dueño del apartamento a hacer parte de la comedia exigiéndole a Maruja que le pague la renta y cierre ese consultorio es cuando comienza verdaderamente la trama interesante, pues el personaje de Edwin Garrido guarda un oscuro secreto, el cual sale a la luz después de una serie de hechos, él quiere convertirse en una señorita.

“La trama real comienza cuando mi personaje entra en escena como una mujer, pues Maruja acede a convertirme en una señorita y yo le propongo que además de querer ser una mujer, quiero ser una adivina igual que ella, por lo que terminamos asociándonos y haciendo crecer el consultorio”, contó a EL NUEVO SIGLO Edwin Garrido, protagonista de la obra de teatro.

La comedia avanza con risas y total armonía hasta que un elemento más irrumpe en el consultorio de las adivinas, la nueva señorita se hace tan popular entre los clientes, que Maruja pasa a estar en un segundo plano y pierde credibilidad entre sus seguidores, por lo que inicia una cómica pelea entre las dos adivinas.

“El público disfruta mucho de la puesta en escena, no solo por su trama cómica, sino también porque la historia está muy bien construida y los actores nos apropiamos muy bien de los personajes”, comentó Garrido, y agregó: “En mi caso particular, desde que comencé a crear el personaje me puse en los zapatos de la chica, literalmente, pues mientras ensayaba el libreto iba caminando por mi apartamento en tacones, así mismo, ya tenía experiencia personificando mujeres, pues en otra ocasión le había dado vida a un transformista y la experiencia fue mucho más personal, dado que el maquillador hizo su trabajo, me vestí y salí a la calle a tomar un taxi para presentar un casting, sentí lo que estos seres humanos viven a diario, el acoso y las miradas acusadoras”.

EL CONSULTORIO de las señoritas, una obra de desparpajo