Las zonas donde quedarían las circunscripciones especiales de paz para las 16 curules que se generarán a raíz del acuerdo de paz, será la gran polémica y discusión que se abordará en los próximos días.

Este medio les consultó a los principales líderes de los partidos políticos. El vocero del Partido Liberal, el senador Rodrigo Villalba, expresó que “creo que deben ser zonas muy apartadas del país donde la participación electoral es mínima alrededor del conflicto, es decir está por debajo de la media, como darle oportunidad a esas zonas que se han visto afectadas por el conflicto armado”.

La idea, señaló el Senador, es que puedan participar sin ningún temor, “gran parte de esas zonas muchas veces han ganado los partidos que no son afectos a la insurgencia,  por el Centro Democrático ha ganado en San Vicente del Caguán, tienen Alcalde, no quiero decir que sea en esas zonas, tienen que ser en zonas en las cuales el nivel de participación es muy bajito”.

Indicó que “el Huila poco a poco ha venido entendiendo que este no es un problema de prevención contra alguien, sino una oportunidad para la paz”.

Peligros

El senador Iván Duque, del Centro Democrático, señaló que “yo nunca he estado de acuerdo con las circunscripciones especiales de paz, porque veo que esas circunscripciones se van a prestar para convertirse en zonas de influencia de las Farc en jurisdicciones electorales”.

Agregó además que, “yo he dicho que transitoriamente en Colombia se han utilizado curules para grupos de desmovilizados, pero creo que la proporcionalidad que se les ha dado a las Farc es desmedida frente al tipo de organización que es, su presencia territorial y su influencia sobre la ciudadanía, me parece que eso es desproporcionado”.

Indicó también que “creo que las jurisdicciones electorales no pueden obedecer a ese criterio, porque claramente ya se ve una tendencia para transformar las zonas de concentración eventualmente y desde allí construir esas jurisdicciones”.

Duque manifestó que “creo que hay un gran rechazo en la ciudadanía a la historia criminal de las Farc y darles a ellos cinco curules a dedo sin tener la proporcionalidad electoral suficiente en el Senado y Cámara obviamente los privilegia, y ahora con la creación de esas circunscripciones que van a estar orientadas a las zonas de influencia de ellos, lo que termina registrando es que las Farc tengan un número grande de espacios, sin mucha competencia y un mínimo de votos  para garantizar su presencia en el Congreso”.

El representante del Partido de La U Berner Zambrano, copresidente de la colectividad, anotó que, “estas van a estar necesariamente en aquellos sectores donde más han sufrido la violencia y hay que aclarar que no son de las Farc, son de organizaciones sociales, porque no pueden pertenecer estas curules de Cámara a grupos políticos y para esa fecha, para el 2018, entenderíamos que las Farc ya son un grupo político conformado”.

Más representación

Rodrigo Lara Restrepo, presidente de Cambio Radical, anotó que “por ser una excepción a la regla general de elección de congresistas, deben reducirse al menor número posible, en segundo lugar, creo que estas circunscripciones especiales deben circunscribirse estrictamente a aquellas zonas que tengan déficit de representación, que hayan sido abandonadas históricamente”.

Añadió que las zonas podrían ser la Amazonia caqueteña, el sur del Meta, Catatumbo y regiones del Pacífico. “Pero se debe ser muy vigilante para que estas zonas no sean instrumentalizadas por el nuevo partido político que conformarán las Farc”, sostuvo.

Por su lado, el senador del Polo Democrático Alternativo Jorge Enrique Robledo, acotó que “entiendo que el acuerdo lo que dice es que son en ciertas zonas como desconectadas del resto del país y con desarrollos relativos menores, más incomunicadas, con productos percápita menores, con más necesidades en Salud y Educación”.

Mientras tanto, Germán Navas Talero, también del Polo, subrayo que “Creo que deben de crearse en los lugares donde esos movimientos surgieron, y tuvieron una mayor ascendencia, porque es donde están las personas que los conocieron y los que podrían votar por ellos con más facilidad”.

Arturo Yepes, del Partido Conservador, afirmó sobre el tema que “las circunscripciones especiales naturalmente pretenden darles curules a la gente que vive en zonas que han estado marginadas durante décadas, precisamente para acabar con los factores de la violencia, es decir para que la gente más olvidada del país por fin tenga voz en cuerpo deliberativo del país, Por eso estamos de acuerdo con que el Catatumbo, Norte de Santander, Arauca, Arauquita, algunos municipios del Urabá Antioqueño y algunos municipios del Huila deberían tener alguna circunscripción especial”.  

El legislador de la Alianza Verde Jorge Iván Ospina, manifestó que, “la inclusión política siempre ha sido un factor de violencia en Colombia, por eso bienvenido todo aquello que signifique incorporación de nuevos sujetos activos de la política con representación en el Congreso”.

Subrayo de la misma manera, “para mí sin duda hay que fortalecer los terrenos más descuidados, Chocó, Guajira, Arauca, Casanare, Guainía, Cauca y Putumayo, esas son fundamentalmente las zonas donde debe estar la mayor parte de representación”.

Dijo también, “deben constituirse muy bien los mecanismos para la participación en política para que sean nuevas organizaciones políticas y con las cinco curules que tendrán en el Senado no habrá allí una contradicción, no debe expandirse en Senado porque al contribuyente bastante le cuesta 102 senadores, pero tampoco las cinco curules deben ir con cargo al Polo, el Verde, Opción Ciudadana , porque son las que menos caudal tienen, esas cinco curules debe venir de los partidos tradicionales con alta representación”.