Sin que mediara un acuerdo programático y ni siquiera con la presencia del candidato o su fórmula vicepresidencial, los partidos Liberal y Conservador pidieron unilateralmente ayer a sus bases votar por el aspirante uribista Iván Duque.

Llamó la atención que los anuncios de ambas colectividades se hicieron sin la presencia de Duque ni la fórmula vicepresidencial Marta Lucía Ramírez, como tampoco mediando la firma de algún tipo de acuerdo programático con la campaña del Centro Democrático. Tampoco hubo fotos oficiales de estas adhesiones, como sí ocurrió en la contienda para la primera vuelta, que culminó con la votación el pasado domingo.

Según trascendió, por el momento Duque ha preferido no salir en los medios de comunicación al lado de los distintos dirigentes políticos que se han ido sumando a su campaña. Es más, ayer en la mañana, en entrevista radial, insistió en que todos los apoyos son de carácter político, sin ningún tipo de acuerdo burocrático ni se cuotas de poder en un eventual futuro gobierno suyo.

A primera hora, en reunión del Directorio Nacional y la bancada conservadora se anunció la decisión de apoyar a Duque y pedir a las bases del partido que voten por el aspirante uribista el 17 de junio.

A través de un comunicado, los conservadores indicaron que se unían a la campaña “en consonancia con su ideología fundamental, que promueve el orden constitucional contra cualquier intento de dictadura o de afectación a la democracia”.

La colectividad indicó que “trabajará” para que en un posible gobierno de Duque y Ramírez se materialice un Acuerdo sobre lo Fundamental que contiene, entre otros temas, los de familia y mujer, seguridad nacional, educación, empleo, sector agropecuario, democracia e instituciones, medio ambiente, derechos sociales, ciencia y tecnología.

En la campaña para la primera vuelta, los conservadores dividieron apoyos entre Germán Vargas Lleras y Duque.

Partido Liberal

Casi de forma paralela, el expresidente César Gaviria, jefe único de la Dirección Nacional Liberal, anunció que ese partido también pediría a sus bases respaldar la candidatura de Duque. La decisión se tomó por una votación de 39 parlamentarios a favor, dos abstenciones y siete inasistencias.

El domingo pasado el candidato liberal era Humberto de la Calle, pero apenas logró 399.180 sufragios, la votación más baja en toda la historia de ese partido en unos comicios presidenciales, a tal punto que ni siquiera alcanzó el umbral mínimo de votación para obtener la reposición de votos. Tras esa debacle electoral, varios sectores del partido pidieron la renuncia de Gaviria, pero ayer la mayoría de la bancada lo respaldó.

Tanto el expresidente como el aspirante uribista habían tenido una reunión previa en donde hablaron de la posibilidad de esa adhesión.

Según el exmandatario, el propio Duque le expresó interés en que el liberalismo haga parte de la coalición que está conformando para un eventual gobierno.

Gaviria sostuvo además que estuvieron analizando punto por punto las propuestas del partido para que el candidato “las tuviera en cuenta” y aceptó varias de las iniciativas de los liberales.

El expresidente Gaviria aclaró que se mantendrán las diferencias con Duque frente al acuerdo de paz. Al respecto, la decisión es que se someterán a lo que diga la Corte Constitucional.

Polo con Petro

Ayer por la tarde, el Comité Ejecutivo del Polo Democrático aprobó una declaración en que señala que las votaciones de Sergio Fajardo y Gustavo Petro “sumadas representan la expresión mayoritaria de la ciudadanía para derrotar a la maquinaria corrupta y clientelista del establecimiento y lograr un gobierno democrático” y por lo tanto “adopta oficialmente la candidatura a la Presidencia de la República” de Petro.

Tras precisar que se trata de una “decisión adoptada por mayoría”, la declaración señala que “la expresión minoritaria” de ese organismo partidista “dejó constancia de su decisión de votar en blanco”.

Aunque la declaración no lo precisa, la “expresión minoritaria” es el MOIR que orienta Gustavo Triana, secretario general del Polo, y del que hace parte el senador Jorge Enrique Robledo.

Dos partidos pendientes

Tras la decisión ayer de liberales, conservadores y el Polo (La U dejó el martes en libertad a sus dirigentes y bases electorales de apoyar al candidato que quieran) sólo faltan dos partidos por definirse.

De un lado, la Alianza Verde, que apoyó la candidatura de Sergio Fajardo. Según trascendió las  reuniones en esa colectividad arrancaron el lunes y no han podido llegar a un consenso. Hay tres corrientes: una primera opta por votar en blanco y mantener la independencia política; otra prefiere dejar en libertad a las bases para que voten por quien quieran; y una tercera quiere unirse a Petro.

El senador electo Antonio Sanguino afirmó que la agenda de gobierno de Fajardo (que sumó el domingo más de 4,6 millones de votos) tiene más afinidad con la de Petro, pero que los verdes no tienen autoridad para pretender endosar unos votos que no son suyos, sino de toda la coalición (Alianza, Polo y Compromiso Ciudadano).

Las cinco consideraciones que se hicieron por parte de la Alianza Verde para un hipotético acuerdo con Petro son respetar la Constitución de 1991 en el marco del equilibrio de poderes, no realizar una constituyente, respetar el derecho a la propiedad, decisiones fiscales responsables, designación de gabinete ministerial por meritocracia y apoyar la consulta anticorrupción.

Hoy la Alianza Verde continuará las deliberaciones para definir a quién apoyan.

De otro lado, tampoco se conoce la decisión oficial de

Cambio Radical, pero todo hace indicar que se irán con Duque.

Las directivas del partido que respaldó la candidatura de Germán Vargas Lleras enviaron todas sus propuestas programáticas a la campaña de Duque y están esperando una respuesta sobre a qué se compromete el candidato uribista al respecto.

Los parlamentarios de Cambio agradecieron a Duque su intención de acoger algunas de las iniciativas adelantadas por Vargas Lleras.