Llamado de Coralina para cuidar las mantarrayas | El Nuevo Siglo
Foto Cortesía
Sábado, 27 de Mayo de 2017
Redacción Nacional

Un llamado de atención a la comunidad de las islas y sobre todos los prestadores de servicios turísticos en Cayo Acuario para que den a conocer y saber más sobre el manual existente para la prestación del servicio turístico tour a mantarrayas, hizo la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Departamento Archipiélago de San Andrés Providencia y Santa Catalina, Coralina, como protector de los recursos naturales del archipiélago.

Coralina reitera que en el sitio (Cayo Acuario) lo que existe es un aprovechamiento de las especies naturales que se encuentran en el sector, a través de una actividad turística que se viene desarrollando hace más de 10 años, que ha venido creciendo debido al aumento del turismo en la isla.

Ante este aprovechamiento, Coralina hizo un estudio donde se obtuvo la real amenaza de la especie (mantarraya) frente a esta actividad que se realiza en el parque natural, estudio que permitió tomar como medida preventiva la regulación sobre este tipo de actividad con la especie, por lo que se recomendó organizar y hacer la actividad de una manera que incluyera las especificaciones del caso a turistas y el buen trato y cuidado a la especie.

Es por ello que se realizó todo un proceso de capacitación, adiestramiento, generación de guías, capacidad instalada, construir y adecuar una zona para generar el show con las rayas.

Coralina recuerda que hay una regulación que restringe el manejo y el uso de las especies en ese sector sobre todo las rayas, por lo que reitera que si existe una autoridad ambiental que ejerce la actividad de control y reconoce que existe una actividad comercial que se está dando a través del avistamiento.

Señaló que hay un riesgo contra la especie, como cualquier intromisión que se haga contra los recursos naturales, pero los estudios arrojó que la actividad que se está ejerciendo se puede hacer de manera controlada y el riesgo se puede minimizar; actividad que es una acción clara que se puede tener una interacción directa con los recursos naturales sin tener que afectarla o dañar su estado o condiciones naturales.

Para los que manejan y realizan el tour de rayas como actividad turística, existe una resolución por medio del cual se regula el sitio donde se puede efectuar, por lo que se definió el sector de White Wata cerca al complejo de cayo acuario, único lugar donde se puede efectuar esta actividad, además está delimitado por un boyado, lo que señala el número de personas que pueden estar sobre el área, además se tiene el plan de boyas de amarre para que también se regule la parte marítima, se tienen establecidos aspectos de seguridad tanto para la especie como para las personas que vayan a desarrollar el tour, así como también se tienen los horarios en que se debe hacer el tour. Regulaciones que están en proceso de implementación para controlar toda esta actividad.

Recordó que existen sanciones establecidas en la ley 1333 que habla sobre el régimen sancionatorio ambiental, sobre manipulación de especies silvestres, además la resolución establece unas medidas de control grupal e individual en el sentido que haciéndole seguimiento se encuentran gran cantidad de personas incumplimiento con lo establecido en la resolución que regula y controla este tipo de tour, se cerrara la zona de acuerdo a la gravedad del asunto por días, semanas, meses o totalmente.

A través de una resolución, que aplica para la totalidad del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina declarada Reserva de Biosfera Seaflower por la Unesco, establece que la raya es un recurso natural correspondiente a un orden de peces cartilaginosos del superorden Batoidea, estrechamente emparentados con los tiburones.

“Actualmente la especie objeto de aprovechamiento turístico es Hypanus americanus (syn. Dasiatys americana). La especie es comúnmente denominada mantarraya a pesar de no pertenecer a este grupo.

Los turistas y pobladores tienen la oportunidad de nadar junto a esta especie y de ahí la preocupación por el daño que les puedan causar