El desplome de un edificio en Cartagena, dejó cinco personas muertas, 19 rescatadas, nueve de ellas heridas de gravedad y que ya fueron remitidas a centros asistenciales de la ciudad.

El colapso ocurrió alrededor de las 11:10 a.m. en el barrio Blas de Lezo por causas que se investigan, explicó el director de Socorro de la CRC, César Urueña.

La estructura era de seis pisos, de los cuales los dos primeros estaban habitados, aseguró. Presuntamente las personas atrapadas son obreros de la construcción y habitantes del lugar, agregó.

Entre los heridos han tres niñas y un niño de 7 y 10 años, hijas del vigilante, que vivían en la obra de construcción. Estas fueron rescatadas por los organismos de socorro que se encuentran en el sitio.

Desde el lugar de la emergencia, el alcalde de Cartagena Manuel Vicente Duque manifestó que las autoridades no descansarán hasta que los responsables de esta tragedia paguen. “No puede ser que un edificio en pleno siglo XXI se caiga como ocurrió con este”.

Entre tanto, el curador de la Localidad Uno, Ronald Llamas Bustos, afirmó que la licencia que ostentaba el edificio era falsa.

Duque dijo que la obra no contaba con licencia de construcción aunque sí se habrían radicado los permisos en la Curaduría y estaban pendientes de ser autorizados.

Además, según La W, los trabajadores que se encontraban en el lugar del accidente no tenían ningún tipo de seguridad, ni contrato de prestación de servicios. Les pagaban 60 mil pesos diarios y no conocían a los dueños de la construcción.

En el lugar del accidente, Gabriel Ladeuth, quien trabajaba en el segundo piso de la edificación que colapsó repellando paredes, dijo que cuando sintió el estruendo, tuvo como reacción inmediata saltar y al voltear la mirada, vio con sorpresa como ese gesto espontáneo le salvó la vida.

Contó que llegó de Córdoba buscando trabajo en medio de la informalidad que ahoga a Cartagena. “Tengo unos conocidos que me dijeron que llegara a trabajar aquí, que me metían, llevo mes y medio”, manifestó.

Relató que en realidad no sabe para quién trabaja y que fue un amigo de su amigo quien se entiende con el “patrón” que semanal o quincenalmente le hace llegar el pago.

Una columna que se destrozó fue lo que ocasionó el desplome del edificio según cuenta este albañil, aún no sale de su asombro, y con lágrimas recuerda que su ayudante se quedó atrapado arriba y aún no lo encuentran. “Éramos como 30, al final salimos ilesos como 6, que nos percatamos a tiempo y nos salvamos, espero que los 15 que quedaron sepultados resulten con vida', sentencia este hombre que nuevamente tendrá que 'rebuscar' trabajo para salvar a su familia”.