Los aprietos de Maduro | El Nuevo Siglo
Viernes, 28 de Abril de 2017

Aunque, desgraciadamente no creemos que la dictadura de Maduro sea reemplazada en un futuro cercano por un sistema democrático, ya que cuenta con el apoyo firme de unas fuerzas armadas que gozan de amplios privilegios y en cuyos rangos se incrusta el funesto “cartel de los soles” que controla el narcotráfico, las perspectivas del régimen se deterioran rápidamente. El despojar al Parlamento de sus atribuciones fue un error gravísimo y, aunque esta decisión fue revocada parcialmente, el daño quedó hecho. La oposición se aguijoneó, los excesos de la represión se acentuaron (el martes ya se contaban 26 muertos y cientos de heridos) y la reacción internacional, antes adormecida, se avivó. Para comenzar, la influencia de los Estados Unidos en el caso venezolano es de mayor importancia de lo que fue en el caso cubano. El régimen castrista ha sobrevivido más de medio siglo a pesar de la oposición estadounidense, pero contó con la ayuda económica decisiva de la Unión Soviética y luego de una Venezuela en el apogeo de los precios del petróleo. Hoy Rusia es gran productora del hidrocarburo y Cuba es paupérrima. Tal vez la China, importante acreedora, podría comprarle algo.

Si Washington le suspende sus importaciones, Maduro estaría en problemas más serios aun de los que tiene hoy. ¿Tomaría Trump esta decisión? Al menos se sabe que su posición frente a Maduro es menos flexible que la de Obama, indicios de esto son la reunión con Pastrana y Uribe, en cuya agenda, no dudamos, estuvo el caso venezolano, lo mismo que el cambio de actitud de nuestro presidente, hoy, como dijo alguien, el “nuevo mejor enemigo” de Maduro.

La opinión internacional tampoco le es favorable. El miércoles pasado se reunió el Consejo Permanente de la OEA a instancias de 16 de sus miembros, entre ellos Colombia, para tratar de la convocatoria de una reunión de consulta de ministros de Relaciones Exteriores para considerar la situación venezolana. El pasado 3 de abril la OEA había aprobado una resolución sobre la "grave alteración inconstitucional del orden democrático" en ese país.

Venezuela amenaza ahora con retirarse del organismo y pidió la convocatoria urgente de una reunión Extraordinaria de ministros y ministras (sic) de relaciones Exteriores de la Celac  para "Tratar las amenazas contra el orden democrático constitucional en la República Bolivariana de Venezuela, así como las acciones intervencionistas contra su independencia, soberanía y autodeterminación". Poco conocida, la Celac, Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, fue creada a instancias de Chávez, excluyendo a Canadá y los Estados Unidos, pero con Cuba, para hacer contrapeso a la OEA. Chávez esperaba dominar las relaciones internacionales del subcontinente cuando contaba con el apoyo de varios gobiernos izquierdistas. ¿Seguirá una Venezuela aislada perteneciendo a la OEA?