Eurotapes presentó avance en producción de energía renovable | El Nuevo Siglo
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Miércoles, 15 de Marzo de 2017
Redacción Nacional

Un consorcio europeo dedicado a investigar los materiales superconductores acaba de hacer un avance susceptible de “revolucionar la producción de energía renovable”.

El consorcio en cuestión, Eurotapes aglutina a unas veinte universidades, centros de investigación y empresas de nueve países europeos.

Desde hace cuatro años investiga estos materiales, que no oponen ninguna resistencia al paso de la corriente eléctrica.

El consorcio ha estado indagando en un nuevo sistema capaz de “producir cintas superconductoras más baratas y eficientes”, según resumió en su web el Instituto de Ciencia de Materiales de Barcelona (ICMAB), que coordinó el proyecto.

Concretamente, “Eurotapes ha conseguido producir 600 metros de cinta superconductora con un proceso que reduce el coste de producción”, explicó a la AFP por teléfono el coordinador del proyecto, Xavier Obradors, en Barcelona.

“Este material, un óxido de cobre, es como un hilo que conduce cien veces más de electricidad que el cobre”, dijo.

“Con este hilo, se pueden generar por ejemplo cables para transportar mucha electricidad sin pérdidas, multiplicando por cinco la potencia, y la otra gran ventaja es que se pueden generar campos magnéticos mucho más intensos que los que hay ahora”, señaló.

A largo plazo, el proyecto podría “revolucionar la producción de energía renovable”, aseguró el organismo público. Y es que “este nuevo material podría servir para equipar generadores eólicos más potentes y más ligeros”,  explicó Xavier Obradors. De esta forma, añadió, se podría duplicar la potencia de una turbina eólica.

Igualmente podría aprovecharse “para una nueva generación de aviones eléctricos, para que pesen menos”.

Hasta ahora, los materiales superconductores ideados sólo funcionan con temperaturas extremadamente bajas, y las aplicaciones se limitan a los laboratorios.

Pero la industria ha aprendido a trabajar con temperaturas de hasta 200 grados bajo cero, gracias a unos criogeneradores especiales, asegura Obradors.

El proyecto ha trabajado en las aplicaciones industriales de los superconductores y han conseguido fabricar cintas superconductoras, que se pueden utilizar en muchos ámbitos de la ciencia, como la fabricación de imanes para campos magnéticos elevados, generadores eólicos o sistemas eléctricos destinados a la aeronáutica.

Los superconductores se utilizan en muchos ámbitos, como por ejemplo el de la salud, con la resonancia magnética o el uso de aceleradores para algunos tratamientos de enfermedades como el cáncer, o incluso en ámbitos más innovadores como construir aviones eléctricos en el futuro, que necesitan sistemas más eficientes que los actuales.

La responsable del departamento de superconductividad del ICMAB-CSIC, la profesora Teresa Puig, dijo, por su parte, que “han surgido otros proyectos relacionados con las cintas superconductoras gracias al avance de Eurotapes”.

Por su parte, el director de la Representación de la Comisión Europea en Barcelona, Ferran Tarradellas, ha destacado que aunque “los fondos europeos son modestos, pueden suponer un cambio importante en el desarrollo de ciertas políticas que necesitamos de manera urgente en la Unión Europea”.

El proyecto cuenta con un presupuesto de 20 millones de euros, financiado en su mayoría por la Unión Europea. En él participan organismos y empresas de nueve países: España, Alemania, Francia, Reino Unido, Austria, Italia, Eslovaquia, Rumanía y Bélgica./ICMAB-CSIC