Los miembros de la Comisión de Paz del Senado y la Cámara de Representantes acordaron un cronograma  para visitar las zonas transitorias de concentración en las que permanecen los integrantes de las Farc, durante 180 días, para cumplir con los procesos de desarme y desmovilización a los que se comprometieron al firmar el acuerdo de paz con el Gobierno nacional.

Para los legisladores resulta de especial interés conocer de cerca  cuál ha sido el avance y los problemas que han enfrentado estos lugares para su implementación ya que, según voceros de las Farc, el Gobierno no ha cumplido a cabalidad con el desarrollo de los mismos.      

Esta, entre otras razones, motivó al grupo de congresistas, entre ellos los senadores Juan Manuel Galán, Iván Cepeda, Luis Evelis Andrade y Rodrigo Villalba; y a los representantes a la Cámara, Ángela María Robledo, Alirio Uribe y Andrés Villamizar, a delinear un cronograma de visitas a estos puntos en donde se concentraran más de 7 mil  guerrilleros.   

Fue así como los legisladores de la Comisión de Paz del Senado y la Cámara de Representantes acordaron que la primera zona que visitarán será en el departamento del Cauca, el próximo jueves, y luego, el 3 de abril, estarán arribando al Caquetá.

El Gobierno y las Farc acordaron la creación de 19 zonas veredales y 7 puntos transitorios  con el propósito de garantizar el cese al fuego y la dejación de armas para su desmovilización y la  reincorporación a la vida civil.

No obstante, el Gobierno ha tenido problemas para la adecuación de algunos de estos puntos de concentración, que han originado retrasos en materia de alojamientos, zonas comunes, agua potable, energía y zonas de esparcimiento.

Carlos Córdoba, gerente de las zonas veredales, ha señalado que los atrasos en algunos  de estos puntos se deben a trabas que han puesto los dueños para el arrendamiento de los terrenos, lo alejado de los sitios y la falta de vías para el ingreso de los materiales, entre otros.

Córdoba dijo que también hay algunos casos en que las Farc entorpecieron las labores no dejando ingresar los trabajadores, como forma de presionar la construcción de instalaciones que no están previstas en el acuerdo. El caso de un polideportivo en la zona de Tumaco.