Voto en blanco sería inocuo en mayo | El Nuevo Siglo
Foto El Nuevo Siglo
Lunes, 12 de Febrero de 2018
Redacción Política
A pesar de que en las recientes encuestas que han salido a la luz esta opción para rechazar la clase política o los candidatos en liza se ha ubicado en buen lugar, expertos consideran que el día de las elecciones se desinflará por efectos de la maquinaria o la falta de entender su verdadera importancia.

___________

El voto en blanco ha figurado como una opción para los ciudadanos  en varias de las encuestas presidenciales que se han publicado hasta el momento, colocándose incluso en el tercer y cuarto lugar entre los aspirantes. Sin embargo conocedores del tema electoral indican que es una fotografía del momento, pues aún hay muchos ciudadanos que no han decidido su candidato o no hay una cultura política en esta materia, pero que al final se desinflará el día de las elecciones .

El exregistrador Delegado para lo Electoral, Alfonso Portela, le dijo a EL NUEVO SIGLO sobre el voto en blanco que “ese se desgasta. Las elecciones de Congreso se caracterizan por ser muy fuerte el tema de maquinaria, y obviamente cuando se consulta a la gente es muy distinta la opinión al movimiento que hace la maquinaria. Por eso, las elecciones de Congreso siempre tendrán un porcentaje de voto en blanco, en lo que son encuestas, bastante alto. La gente no ha tomado una decisión todavía y el prestigio del Congreso no es que sea muy halagüeño como para que la gente esté hinchando candidatos, sino más bien piensa es con la animadversión que le tienen al Congreso”.

Agregó el experto electoral que “después de que empieza a moverse el tema y a llegar las elecciones, y eso está muy encima, eso se desgasta. Entonces sí tendrá un porcentaje importante pero no es significativo como para deslegitimar una elección”.

Portela consideró que está lejos en el país que por el triunfo del voto en blanco se tenga que repetir una elección  presidencial, de Senado o de algunas de las cámaras de representantes en disputa, “porque es que hay una dependencia de todo lo que son entidades estatales, el principal empleador es el gobierno, el municipal, departamental, en todas sus líneas. Entonces obviamente ese es el principal votante en las elecciones de Congreso, está movido por una serie de circunstancias. Que llegue el momento en que haya una avalancha de personas que pretendan revocar, para llamarlo de alguna manera, una elección a través de la votación en blanco, estamos muy lejos todavía”.

Por su parte, Camilo Vargas,  Coordinador del Observatorio Político de la Misión de Observación Electoral, dijo a este Diario que “es algo que se ve tanto en las elecciones de Congreso como incluso el voto en blanco le va bien en las encuestas a la presidencia, y no es nuevo, en años pasados ya sucedió esto que las encuestas muestran al voto en blanco muy alto, y curiosamente lo que sucede al final es que lo que nos dicen los datos electorales es que Colombia no tiene una cultura de voto en blanco. Esas proporciones que llega a mostrar en las encuestas el voto en blanco nunca las alcanza el día de las elecciones, y lo que sí vemos en cambio son unas proporciones elevadas, incluso más altas que el voto en blanco, en tarjetones no marcados y votos nulos”.

Vargas dijo sobre esta situación que describe que es grave porque “el voto en blanco es una manifestación ciudadana  de inconformidad con las candidaturas. En cambio los votos nulos y los tarjetones no marcados son votos inválidos, no cuentan en el umbral, no cuentan en la decisión de la gente. Y lo que termina pasando, por un lado, es que la gente desperdicia su voto. Cuando no está conforme con los candidatos que tiene anula el voto, incluso a veces insulta a los candidatos encima del tarjetón o simplemente devuelve el tarjetón sin marcarlo”.

El experto anotó que la otra parte del problema es que “esos porcentajes tan grandes que puede tener en las encuestas el voto en blanco nunca se materializan porque mucha gente no vota. En la MOE calculamos que unos 18 millones de personas por lo menos no van a votar. Los que podrían votar, no van a votar”.

En ese sentido, Vargas dijo a título personal, sin comprometer a la MOE, “es un sesgo que tienen las encuestas, que tiene mucho que ver por qué las encuestas al final no son precisas. Los encuestadores le preguntan siempre a la gente si va a votar, pero para muchos es como incorrecto decir que no va a votar. El voto es un deber ciudadano, pero mucha de la gente que dice que va a votar, no vota. Por eso la votación no sale como las encuestas, y eso afecta el voto en blanco”

Sus efectos

A partir del Acto Legislativo 01 de 2003 el voto en blanco dejó de ser un acto meramente simbólico que permitía al ciudadano manifestar su inconformidad con los candidatos que se presentan a una elección o con la clase política, al establecer que “deberá repetirse por una sola vez la votación para elegir miembros de una corporación pública, gobernador, alcalde o la primera vuelta en las elecciones presidenciales, cuando los votos en blanco constituyan mayoría absoluta en relación con los votos válidos”.

Sin embargo, la Reforma Política de 2009 (Acto Legislativo 01) cambió la palabra mayoría absoluta por mayoría simple, lo cual para juristas como Jaime Castro y Jaime Araújo implicaba que el voto en blanco gana si obtiene más sufragios que el candidato que logra la mayor cantidad de votos.

De acuerdo con el artículo 9 del Acto Legislativo 01 de 2009, "deberá repetirse por una sola vez la votación para elegir miembros de una corporación pública, gobernador, alcalde o la primera vuelta en las elecciones presidenciales, cuando el total de los votos válidos, los votos en blanco constituyan la mayoría".

No obstante, luego la Corte Constitucional, en sentencia C-490 de 2011, declaró inexequible la norma de la Reforma Política de 2009 que ordenaba repetir elecciones "cuando el voto en blanco obtenga más votos que el candidato o lista que haya sacado la mayor votación" y en consecuencia la mayoría necesaria para repetir la elección es mayoría absoluta, es decir el 50% más 1 de los votos válidos, y no mayoría simple.

Voto en blanco en presidenciales

Año 1998 primera vuelta:
. Potencial electoral 20.857.801
. Total votos 10.683.897
. Votos blanco 122.439 (1%)

Año 1998 segunda vuelta:
. Potencial electoral 20.857.801
. Total votos 12.310.107
. Votos blanco 373.659 (3%)

Año 2002
. Potencial electoral 24.208.311
. Total votos 11.249.734
. Votos blanco 196.116 (1,7%)

Año 2006
. Potencial electoral 26.731.700
. Total votos 12.041.737
. Votos blanco 226.297  (2%)

Año 2010
. Potencial electoral 29.983.279
. Total votos 14.764.362
. Votos blanco  224.355  (1.5%)

Año 2014
. Primera vuelta
Potencial 32.975.158
Votos en blanco 770.610 (5,99%)

. Segunda vuelta
Potencial 32.975.158
Votos en blanco 619.396 (4,03%)