De encuestas | El Nuevo Siglo
Martes, 6 de Febrero de 2018

Los últimos resultados de la encuesta de Cifras & Conceptos para las próximas elecciones presidenciales  entregan dos punteros apenas diferenciados por el margen de error, Sergio Fajardo y Gustavo Petro. El cuarto es Iván Duque a quien le favorece ser el de mejor tendencia por su porcentual ascendente. En la otra encuesta, la de Invamer, el puntero es Petro, pero dados los márgenes de error que anuncia la propia ficha técnica, está en un virtual empate técnico con Sergio Fajardo. Vargas es el tercero en las dos, pero Iván Duque pierde con De La Calle en ésta.

Más allá del resultado actual de las encuestas lo interesante son las tendencias y los porcentajes de éstas, porque las elecciones son como el campeonato de fútbol. Da igual ser primero u octavo, lo importante es el resultado en el octagonal. En las elecciones lo importante es llegar a segunda vuelta o asegurar una buena votación en primera que le garantice una posición de peso en las adhesiones para la vuelta definitiva.

Por eso resultan claves las consultas que harán dos de las coaliciones más fuertes la de la derecha con todos sus extremos, desde el medioevo Ordoñista hasta el aparente posmodernismo de Duque, pasando por la siempre adaptable Marta Lucía Ramírez y la de la izquierda con Petro y su eterna autovictimización y Caicedo, con credenciales suficientes desde su exitosa alcaldía de Santa Marta.

Como las consultas serán abiertas se prevé la participación de muchas gentes de otros partidos, tratando de manipular el resultado de acuerdo al interés político. Desde la propia derecha, por ejemplo, les parece mejor enfrentar a la señora Ramírez o a Ordoñez que a Duque. Allá ellos.

En la de la izquierda la suerte parece echada a favor de Petro. Le lleva como 70 puntos de ventaja en cualquier intención de voto a Caicedo. Grave error para ese espectro ideológico. Puestas en una balanza las gestiones de uno y otro al frente de las alcaldías de Bogotá y de Santa Marta, gana de largo Caicedo que volvió a darle dignidad a los samarios, incluida la gran pelea que debió dar para la recuperación de los recaudos enfrentando fuerzas muy poderosas, que aún hoy desde la Fiscalía lo persiguen.

El solo porcentaje de desfavorabilidad que cada uno dejó en su respectiva ciudad debería ser suficiente indicador de la forma de gobernar de cada uno para decidir si van a elegir un candidato con vocación de triunfo o con simple intención de pelear.

 

Esa pelea no es de los que no pertenecemos a ese partido o a cualquiera de los grupos que conforman esa coalición.  O tal vez sí. En una verdadera democracia, la izquierda legal y pacífica tiene derecho a ser opción de poder, sin que sus adversarios nos asusten con los grillos y cadenas que nos esperan. Al fin y al cabo es la derecha la que ha gobernado por más de 200 años, de modo que todavía no sabemos si los otros son mejores o peores.

@Quinternatte