"Las zonas francas ganan dinamismo" | El Nuevo Siglo
Foto cortesía desarrollo ecoómico
Martes, 14 de Febrero de 2017
Redacción Economía

El régimen de las Zonas Francas del país ha recibido ajustes sustanciales debido a algunas modificaciones con la expedición del Decreto 2147 del 23 de diciembre de 2016, así como con la Ley 1819 del 27 del mismo mes y año.

En efecto, el nuevo decreto de políticas de Zonas Francas así como la reforma tributaria respectivamente, efectuaron  ajustes fundamentales a este instrumento de promoción que ha mostrado a lo largo de los últimos 10 años, importantes beneficios en materia de atracción de nuevas inversiones, generación de empleos directos y vinculados, y de manera especial, profundos encadenamientos productivos con las empresas que funcionan en el resto del territorio nacional.

“En general, los cambios introducidos con la nueva normativa son favorables para el régimen de zonas francas. Aduaneramente se permite que los usuarios industriales puedan nacionalizar materias primas, bienes semiterminados, e intermedios en la Zona Franca. Desde el punto de vista tributario, se conserva la base gravable para la liquidación del IVA en la nacionalización de productos manufacturados por usuarios industriales instalados en zonas francas. Por parte del Ministerio de Industria y Comercio, se clarifican definiciones, términos y procedimientos que facilitan la operación en dichas zonas. Estos son mensajes de estabilidad jurídica para las empresas allí establecidas, los cuales son muy bien recibidos por los inversionistas”, aseguró Gustavo Lorenzo, director ejecutivo de impuestos de EY y experto en comercio exterior y aduanas.

 

¿Una mejor normativa?

En este sentido, la posibilidad de modificar el Plan Maestro de Desarrollo General, la definición clara de los requisitos que deben observarse para cada una de las factibilidades jurídicas, financieras, de mercado, económicas y técnicas, la posibilidad de ingresar bienes usados, entre otros, son algunos de los temas positivos de la nueva normativa que reportan una buena recepción de parte de los empresarios. Otros aspectos  como la reducción en el término de los tiempos de las Zonas Francas Permanentes Especiales de 30 a solo 15 años, la limitación de los procesamientos parciales, los planes de internacionalización para algunas empresas y compromisos de generación de siete empleos para las empresas pequeñas, Minipymes, en las zonas francas; hacen que algunos empresarios y asesores sientan que al final pudo haberse logrado una mejor normativa.

No obstante lo anterior, para el experto de EY el resultado obtenido con estas dos disposiciones es adecuado, aunque es importante que en la práctica diaria no se generen obstáculos aduaneros ni logísticos en la operatividad de las empresas, de tal manera que se adapten los negocios y se apoye decididamente la dinámica empresarial, factores que pueden observarse en jurisdicciones cercanas a Colombia y con las cuales competimos en materia de atracción de inversiones.

“Algunos opinan que las zonas francas colombianas han retrocedido frente al resto del mundo, sin embargo mi visión es mucho más positiva. El régimen franco en Colombia sigue siendo tremendamente atractivo y no resulta objetivo ni viable efectuar comparaciones con el de países como Costa Rica o República Dominicana, los cuales tienen un tamaño de mercado mucho menor que el nuestro”, recalcó Lorenzo.

Desde el punto de vista fiscal hubo un incremento del 15% a 20% en la tasa del impuesto a la renta, comparativamente con las empresas ubicadas en el territorio nacional, para el año 2017 se puede verificar una diferencia de 20 puntos entre las primeras y las segundas y para el año 2018, dicha diferencia en el impuesto a la renta podrá ser de 17 puntos.

“Estamos a la espera de la regulación reglamentaria que emita el Gobierno nacional respecto de esta nueva normativa, la cual debe estar encaminada a facilitar la actividad de los usuarios de las zonas francas con el fin de que este instrumento siga siendo un motor de generación de empleo, atracción de inversión y que además contribuya al incremento de las exportaciones no minero energéticas como lo ha venido haciendo en los últimos años”, concluye el experto de EY, Gustavo Lorenzo.