Los páramos del país, empezando por los de Boyacá, serán la fuente para generar los llamados bonos de carbono que los países industrializados deben adquirir para compensar las grandes emisiones de gases efecto invernadero causantes de calentamiento global y cambio climático.

Las naciones más afectadas por el cambio climático son las del trópico aunque, curiosamente, son las que menos gases efecto invernadero producen. Por ello les corresponde compensar dicha situación.

Con los recursos de los bonos, la Corporación Autónoma de Boyacá, Corpoboyacá, recuperará los suelos de los páramos de ese departamento que representan el 18,5% de los páramos de Colombia y que pueden captar más de 200 millones de toneladas de carbono equivalente, una acción vital para la supervivencia del planeta.

“La Amazonía y los páramos atrapan los gases que las grandes potencias emiten al aire y si las selvas y los páramos se reducen o desaparecen, el planeta no puede respirar, ni sobrevivir”, dijo el director de Corpoboyacá y autor del proyecto, José Ricardo López.

El funcionario ya ha conversado con representantes de los gobiernos de Suecia, Estocolmo y la Unión Europea, interesados en el proyecto.

Boyacá tiene 538.000 hectáreas de páramos, algunos de los cuales están afectados por el mismo cambio climático y por la intervención humana con actividades como la agricultura, la ganadería y la minería que deben ser retiradas de esas zonas de manera ecológica y técnica, bajo la supervisión de Corpoboyacá.

Los páramos son ecosistemas privilegiados ubicados en pocos sitios estratégicos del planeta, entre ellos Colombia, donde gracias a su altura y bajas temperaturas pueden equilibrar también el calentamiento global, a la vez que son fuente de agua, reguladores del ciclo hídrico y nicho de fauna y flora, por lo cual López sostiene que es prioritario recuperarlos y conservarlos.

Como parte de este proyecto la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Boyacá, UPTC, realizó durante tres años una investigación de los suelos de los páramos de Boyacá con tres categorías: los que están intervenidos con minería y agricultura, los que se recuperan de esas actividades y aquellos completamente vírgenes.

El proyecto “Potencial de captura de CO2 asociado al componente edáfico en páramos de la jurisdicción de Corpoboyacá, Departamento de Boyacá, Colombia”, es la base con la cual lograrán la certificación internacional que generará los bonos a transarse en el mercado mundial de bonos de carbono.

Los investigadores escribieron el libro “Suelos de los Páramos de Boyacá, Ecosistemas potenciales para la captura de carbono”, que se lanza a finales de este mes, en donde sustentan científicamente que los páramos son vitales para frenar el impacto del cambio climático y sus suelos pueden capturar/secuestrar CO2, uno de los principales gases de efecto invernadero en un promedio de 400 toneladas de carbono por hectárea al año.

Para ello deberán reubicar a mineros, agricultores y ganaderos que se encuentran en la zona de páramo, amparados por una sentencia de la Corte Constitucional que estableció que los territorios de los páramos no pueden usarse para minería.

Corpoboyacá es la autoridad ambiental de Boyacá, cuya misión es proteger, a través del Sistema Regional de Áreas Protegidas (SIRAP), 12 áreas de carácter regional conformadas por siete Parques Naturales Regionales, 4 Reservas Forestales Protectoras y un Distrito de Manejo Integrado.

Bajo la administración del actual director, José Ricardo López, lidera el proyecto de conservación, restauración y uso sostenible de los bosques del Parque Natural Regional Serranía de Las Quinchas y su área de influencia, proyecto presentado y aprobado por DNP y al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible- MADS, el cual tiene por objetivo el establecimiento de 1.000 hectáreas de bosques productores protectores en la zona amortiguadora del área protegida.

“Con estos y otros proyectos de gran impacto Corpoboyacá se reafirma como líder en gerencia efectiva al implementar programas de gran impacto en la protección del planeta”, señaló la Corporación en un comunicado.

Bonos

Según el Sistema Nacional de Información Ambiental los bonos de carbono son las Reducciones Certificadas de Emisiones de Gases Efecto Invernadero o CERs, (Certified Emission Reductions), que es la unidad correspondiente a una tonelada métrica de dióxido de carbono equivalente. Se transan en el Mercado del Carbono.