Con efectos que únicamente el teatro puede ofrecer, el público capitalino podrá vivir una  experiencia con el miedo, que literalmente los hará temblar en sus asientos.

En esta escalofriante cita, los espectadores estarán inmersos en un recinto de terror, con  una ambientación que asusta, ayudada por fantasmagóricos efectos  de sonido. Casa E está dispuesta a convertirse  en una mansión del miedo para recibir a “La dama de negro”, la primera historia de teatro de terror que se presentará en Colombia.

Esta obra llega al país con el objetivo de que el  público reviva esos miedos de la infancia, y despertar extrañas sensaciones tanto en los escépticos como en los racionales que estén dispuestas a dejarse llevar.

Arriesgando un poco, con la innovación que propone este tipo de teatro, Robinson Díaz de la mano de Rafael Perrín y su grupo de trabajo, tras  de tres años de esfuerzo, lograran traer esta terrorífica experiencia, que lleva más de 25 años de éxito en España, Inglaterra y México.

EL NUEVO SIGLO  entrevistó a Díaz, productor y protagonista de la obra, para  conocer un poco más acerca de la misma, que estará en las tablas desde el próximo 3 de marzo.

EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué fue tan complicado traer La dama de negro al país?

ROBINSON DÍAZ: No, no fue complicado, pero traer un producto o idea nueva cuesta, no solo a nivel económico, sino también a nivel conceptual. ya que esto implica un esfuerzo de todo tipo. El lograr cuadrar mis tiempos, con el que requería para otras producciones que estaba adelantando en el momento, al igual que con los de Rafael Perrín, quien se encontraba dirigiendo otros proyectos en México, no fue fácil. Pero ya estamos aquí y estrenamos el 3 de marzo esta obra que le permitirá disfrutar a la gente de un espectáculo distinto, que además lleva 25 años de éxito en México, España e Inglaterra.

Este es un espectáculo que va directo a esos miedos infantiles que todos tenemos. Es una experiencia de terror, pero más que eso es una experiencia con el miedo. Es una historia fantástica con fantasmas,  la cual no ataca ningún credo o ideología, pues está contando un poco de todo ese repertorio de la novela gótica inglesa, sin olvidarnos que es de carácter familiar.

ENS. ¿Cómo es la adaptación del teatro para generar suspenso?

RD. Es muy buena, la adaptación que hizo Stephen Mallatratt junto a la puesta en escena de Rafael Perrín me ha llevado a ver esta obra seis veces, con eso lo digo todo. Traerla a Colombia es un sueño cumplido. Es un teatro fuerte, absolutamente bien hecho, con una adaptación muy inteligente en el que la gente va a pasar momentos muy agradables, que  le permitirá volver a la niñez cuando se tenía pánico a los  cementerios, los espantos y las apariciones.

ENS ¿Cómo son los efectos especiales?

RD Están en todos los recursos teatrales como  efectos de sonido, ambientación y  vestuario. Todo al servicio de una historia muy sólida y a muy bien probada, manejada por Rafael Perrín como toda una orquesta, donde cada efecto tiene su punto, cada silencio cuenta y donde se juega con la oscuridad. Es utilizar todos los recursos que hay en una sala de teatro, en función de una muy buena historia.

No es una obra donde vayan a aparecer muertos, descabezados, algo gory o bizarro, no es para gente enferma de la cabeza. Esto para mí es un parche familiar. Es la posibilidad de meterse a una casa del miedo, a ver una historia sencilla pero que sicológicamente ataca tu subconsciente.

Pero mientras el cine y la televisión tienen capacidad de jugar con la fotografía, la iluminación y crear efectos extraños, la magia del teatro está en la obra y por esta razón con mi esposa, Adriana Arango, el apoyo de Rafael Perrini, la casa E con Alejandra Borrero y Manolo Orjuela, trajimos esta historia a Colombia.

ENS. ¿Puede contarnos más acerca de tu personaje en la obra?

RD Yo soy el narrador principal en la obra. Yo soy Arthur Kipps, quien vive toda la historia, y tengo la misión de ir hasta la mansión a hacer diligencias de un testamento y a recoger otros papeles. Pero al entrar a la mansión ya no puedo salir y es allí donde me encuentro y enfrento a La dama de negro, quien es la responsable de todo lo que sucede allí y en toda la región.

 ENS ¿Cómo es ese trabajo con el director Rafael Perrin?

RD Es estupendo. Es un tipo muy brillante, carne de teatro, es una persona que conoce muy bien la escena. Un director muy experimentado, quien no solo ha realizado esta obra, sino también muchos musicales en México y actualmente está dirigiendo televisión. Pero eso no es todo, también ha actuado en muchas obras de teatro y además está enamorado de Colombia.  Actualmente está en México, pero dejo en su lugar a Cesar Perrín, su hijo,  quien también hace parte de esta fantasmagoría. Estos dos personajes son muy inteligentes, trabajadores y vigorosos, hay que frenarlos por que trabajan mucho más de la cuenta. Me siento muy respaldado por ellos no solamente con la experiencia sino en la sensibilidad. Estamos muy contentos porque yo creo que va a ser un suceso teatral.

ENS ¿Cómo es esa experiencia de trabajar terror?

RD Yo he hecho cosas de terror y misterio en televisión como La mujer del presidente y una película de terror con Miguel Urrutia. Aunque personalmente no puedo con el terror, yo no soy capaz de ver una película de esas. El día que vi El Aro con mi esposa duré 15 días sin poder dormir, estaba cagado del miedo.  Pero curiosamente me metí con esta obra y los invito a que vengan y pasen dos horas de puro miedo. Yo era muy escéptico, porque soy muy racional, cuando fui a verla en ciudad de México dije: ¡Ahh…que me van asustar estos maricas…!. Pero, preciso, a los 30 minutos ya me estaba preguntando ¿A dónde metí?.

También es muy rico ver a la gente asustada, llenos de miedo en la oscuridad. Estoy muy contento, sueño  cumplido traerlo a mi país y quiero que la gente disfrute de otra alternativa en teatro, donde aunque es difícil hacer terror,  se logra con varios tipos  de jugadas.

ENS ¿Cómo cree que será la acogida del público?

RD Tengo toda la expectativa y me pregunto ¿Será que sí o todo un hp…fracaso? Pero como diría mi mamá,  el que no arriesga un huevo no saca un pollo yo  estoy arriesgando mi plata, mi energía y estoy convencido que la gente va a sentir lo que yo sentí viendo esta obra.