Papa insta a respetar, valorar y consultar a los pueblos indígenas | El Nuevo Siglo
Foto Agence France Press
Miércoles, 15 de Febrero de 2017
Redacción Web con AFP

El papa Francisco instó a los gobiernos a respetar, valorar y consultar a los pueblos indígenas durante un encuentro en el Vaticano con los participantes en el tercer Foro de los Pueblos Indígenas, que se celebra en Roma.

"Creo que el problema principal está en cómo conciliar el derecho al desarrollo, incluyendo también el de tipo social y cultural, con la protección de las características propias de los indígenas y sus territorios", señaló el papa argentino ante los asistentes al encuentro promovido por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).

"Siempre debe prevalecer el derecho al consentimiento previo e informado, según exige el artículo 32 de la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. Sólo así se puede garantizar una cooperación pacífica entre las autoridades gubernamentales y los pueblos indígenas, que supere contradicciones y conflictos", aseguró el papa latinoamericano, quien conoce el problemas desde cuando era obispo de Buenos Aires. 

Francisco, quien en 2016 en México pidió perdón a los indígenas por el maltrato y la inequidad, invitó a los gobernantes a elaborar "directrices y proyectos que tengan en cuenta la identidad indígena, que presten una atención especial a los jóvenes y las mujeres", dijo.

"Inclusión, y no consideración solamente", precisó el papa Francisco.

"Esto implica que los gobiernos reconozcan que las comunidades indígenas son una parte de la población que debe ser valorada y consultada, y que se ha de fomentar su plena participación, a nivel local y nacional", explicó.

"A esta necesaria hoja de ruta puede ayudar de manera efectiva el FIDA con su financiación y competencia, reconociendo que 'un desarrollo tecnológico y económico que no haga un mundo mejor y una calidad de vida integralmente superior no puede considerarse progreso'", dijo al citar un pasaje de su encíclica "Laudato sí", en la que vincula, como pecado, la destrucción de la tierra con la pobreza.