Por su posible participación en 2009 en la adjudicación irregular del contrato para la construcción de túnel interconector entre el río Tunjuelo y la planta de tratamiento Canoas, fue capturado el ingeniero Andrés Alberto Cardona, socio y miembro de la junta directiva de la empresa ACC Ingeniería.
Al lograr que la Empresa de Acueducto de Bogotá (EAB) le adjudicara el interconector Tunjuelo – Canoas (por el que se pagaron 244.000 millones de pesos), la multinacional brasileña Odebrecht también sacó tajada del carrusel de la contratación en la capital.
De acuerdo con la información de la Fiscalía, el detenido sería presuntamente el encargado de recoger los sobornos del consorcio y enviarlos a los funcionarios públicos, en el caso del contrato para construir la mencionada obra.
El contrato para construir la obra que se inició en el sur de la capital del país, fue celebrado en 2009, entre la EAB y el Consorcio Canoas, conformado por las empresas CASS del grupo Solarte y Odebrecht.
Este martes la Fiscalía le imputará cargos a Cardona como presunto responsable de los delitos de cohecho por dar u ofrecer e interés indebido en celebración de contratos.
En la investigación que adelanta la Fiscalía obran varias confesiones de los implicados.
La investigación de la obra Tunjuelo – Canoas – Río Bogotá, la adelanta la Dirección de Fiscalía Nacional Especializada contra la Corrupción y hace parte de las 11 líneas que la Fiscalía abrió, luego de que se conoció a nivel mundial el escándalo de la constructora Odebrecht.
En su momento, el condenado contratista Emilio Tapia le dijo a la Fiscalía que Cardona era aún más importante que Álvaro Dávila y Julio Gómez.
Cardona, de acuerdo con lo dicho por Tapia, presionó la entrega del citado contrato, así como otros de la EAB y la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp).
Según Tapia, Cardona “manejaba el acueducto y después también la Uaesp”.
Fiscalía vincula a director de ANI
De otra parte, mediante interrogatorio, la Fiscalía vinculó formalmente al actual director de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, a la investigación que por el pago de sobornos de Odebrecht para quedarse con los contratos de la ruta del Sol 2.
La Fiscalía busca determinar la actuación de Andrade en la firma del otro sí que le adjudicó la vía Ocaña-Gamarra al consorcio de Odebrecht sin licitación alguna, trámite por el que el detenido exsenador Otto Bula habría recibido 4,6 millones de dólares, de los cuales, según declaró él mismo, monetizó 1 millón de dólares que entregó en dos contados, previo descuento de su respectiva comisión del 10 por ciento, al empresario Andrés Giraldo en un restaurante al norte de Bogotá para que a su vez se los entregara a Roberto Prieto, gerente de la campaña reeleccionista de Juan Manuel Santos en 2014.
Hace un mes Andrade, una vez estalló el escándalo, declaró ante la Fiscalía señalando que no tuvo nada que ver con la adjudicación del contrato, porque en ese entonces no estaba en el cargo.
Sin embargo, sí reconoció que ya fungía como director de la ANI cuando se firmó el mencionado otro sí, así como cuando se le adjudicó a Navelena (también consorcio de Odebrecht) el contrato para la navegabilidad del Río Magdalena, que actualmente está bajo la lupa judicial. En este último caso, como lo ha publicado EL NUEVO SIGLO, está en investigación disciplinaria toda la Junta Directiva del Banco Agrario por haberle concedido a Navelena un préstamo de 120.000 millones de pesos cuatro días después de ser declarada en quiebra por la Superintendencia de Sociedades.
Cuando Andrade acudió a la Fiscalía hace un mes, entregó toda la documentación que tenía la ANI sobre el proceso licitatorio de la Ruta del Sol 2, esperando se aclararan las dudas que había sobre el mismo y demostrando que en ese momento no estaba en el cargo. Sin embargo, al revisar la documentación, paradójicamente, el ente acusador decidió vincularlo formalmente al proceso que se sigue por la firma del otro sí.