Motos, las que más producen emisiones de CO2 | El Nuevo Siglo
Foto El Nuevo Siglo - Juan Sebastián Cuellar
Miércoles, 22 de Febrero de 2017
Redacción Nacional

En Bogotá las motocicletas equivalen al 24% del total de vehículos utilizados, y el 99% opera con gasolina. Los automóviles a gasolina representan el 93%, los buses de trasporte público el 1,2% y los buses troncales de Transmilenio solo el 0,1%, así lo reveló un estudio de la Universidad Nacional que además revela que las motos son las que más producen emisiones de CO2.

Al respecto EL NUEVO SIGLO consultó con la investigadora Yohen Cuéllar, magíster en Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional, quien determinó cuáles son los impactos ambientales de toda la cadena de producción de combustibles que abastecen los vehículos de transporte de pasajeros de Bogotá.

“Aplicamos una metodología conocida como análisis de ciclo de vida, que se encarga de evaluar las emisiones de un proceso desde la extracción de la materia prima hasta que se usa  y en el caso de los combustibles buscamos comparar cuál modo de transporte era mejor según el tipo de fuente energética que utilizaban los vehículos. Como unidad de referencia comparamos los kilómetros recorridos por persona transportada, de lo cual consideramos los contaminantes: dióxido de carbono equivalente para dar el aspecto invernadero y material particulado menor a 2.5 micros porque es de los contaminantes que más afecta la salud de la población y es un problema en Bogotá”, dijo la investigadora Cuéllar.

Así mismo, la experta explicó, “en el caso de las motocicletas únicamente pueden transportar 2 pasajeros, pero tienen unas emisiones de combustible equivalentes casi a las de un automóvil. En el caso de los vehículos pesados como los de Transmilenio, ellos usan diésel que tiene más potencia energética. Por ejemplo los automóviles llevan de uno a cinco pasajeros; los taxis, cuatro pasajeros (sin tener en cuenta al conductor) y los buses, desde la capacidad de diseño hasta un sobrecupo del 25%”, complementó.

Equivalencia técnica

La investigadora Yohen explicó técnicamente los equivalentes técnicos de dichos impactos, “las motocicletas de cuatro tiempos con cilindraje mayor a 150 cc emiten 167 gramos de CO2 por kilómetro recorrido y pasajero transportado (g/km-pasajero), seguidas de los taxis que utilizan gasolina y emiten el 60% de este valor, y los automóviles sin catalizador, que alcanzan el 56% de las emisiones proporcionadas por las motocicletas”.

Para calcular cuántos contaminantes emite un vehículo por kilómetro recorrido y pasajero transportado, la investigadora Cuéllar recopiló información de las secretarías de Movilidad y de Ambiente, y utilizó un software especializado en la aplicación de la metodología ACV.

“Esto se hizo con el fin de analizar la efectividad del uso del combustible respecto a las personas que transportan. Para ello se tuvo en cuenta la capacidad de diseño de cada vehículo y la cantidad de pasajeros que puede movilizar”, explicó la ingeniera.

En la investigación también se evaluó la emisión de material particulado, es decir las partículas muy pequeñas que se pueden introducir en el organismo y causar afectaciones como enfermedades respiratorias.

Los vehículos que generan las menores emisiones de estos contaminantes son los que funcionan con gas natural. De los que usan combustibles líquidos, los buses troncales de Transmilenio aportan una de las emisiones más bajas de material particulado: 3,4 miligramos por kilómetro recorrido y pasajero transportado (mg/km*pasajero).

Por otro lado, los buses con capacidad de 35 a 60 pasajeros tienen las mayores emisiones: 21,1 mg/km*pasajero. En este aspecto, las motocicletas exceden de 3 a 5 veces las emisiones de los buses de Transmilenio, puesto que alcanzan los 18,8 mg/km*pasajero.

Si no se tiene en cuenta la cantidad de pasajeros transportados, los buses de Transmilenio a diésel son los que emiten mayores emisiones de material particulado (PM2.5) y GEI, porque consumen más combustible.

Sin embargo, si la flota de Transmilenio pasa a vehículos eléctricos reduciría las emisiones de GEI en un 86% comparado con los que utilizan diésel. Así mismo se reduciría el material particulado en un 88%, lo cual sería favorable en la lucha del cambio climático y la disminución de enfermedades respiratorias.

La investigación también concluyó que no necesariamente estas emisiones se dan al final, en la quema de combustible, sino que una gran parte también se da durante la producción de la materia prima.

“En el caso de la producción de etanol carburante se destaca que su generación tiene un aporte importante de material particulado por la quema de la caña antes de la cosecha. Las afectaciones mencionadas no se van a dar directamente en Bogotá, pero sí en las poblaciones cercanas a estas plantaciones”, concluyó la ingeniera, quien destacó que en el día sin carro y sin moto del pasado 2 de febrero se notaron los resultados en el impacto ambiental.

Bogotá, 5ª ciudad con peor tráfico en el mundo

Aunque según la última jornada de Día sin Carro y sin Moto que se realizó en Bogotá (22-02-2017), la Alcaldía Mayor reportó una reducción del 32% en la emisión de material particulado, un nuevo informe deja a la capital dentro de un ranquin no tan decoroso.

Dicho estudio es la tabla de tráfico global de Inrix que muestra que Bogotá es la quinta ciudad con peores condiciones de tráfico del mundo y solo es superada por Los Ángeles, Moscú, Nueva York y San Francisco.

El índice analizó los desplazamientos urbanos, la condición del tráfico y la sonoridad en más de 1.000 ciudades de 38 países y expone que entre las 15 ciudades con peor tráfico, solo aparecen tres latinoamericanas: Bogotá, São Paulo (6º) y Caracas (12º).

El análisis, que también observa el promedio de horas que pasan los conductores en trancones al año por país, ubica a Colombia en segundo lugar con 47 horas, tan sólo superado por Tailandia con 61 horas.

Sobre dicha problemática, EL NUEVO SIGLO consultó al director del Observatorio de Logística y Movilidad de la Universidad Nacional, José Stalin Rojas, quien aseguró, “estoy de acuerdo con ese estudio, lo confirma también la encuesta de ciudades cómo vamos y el índice Waze. Estos 3 estudios confirman que desafortunadamente Bogotá está entre las ciudades con peor tráfico del mundo. Lo que hay que resaltar es que la solución lleva años y todavía nos hace falta años para solucionar el problema del tráfico en Colombia”.

El Director del Observatorio explicó que “la velocidad promedio se ha estancado, la infraestructura no ha avanzado, los proyectos de Metro y soluciones VRT es decir Transmilenio, tampoco han avanzado al ritmo que  veíamos, además de eso ha deteriorado lo que se llama el comportamiento dentro de los sistemas transporte, conocido como cultura ciudadana, entonces desafortunadamente ha habido un deterioro paulatino que reflejado en esas cifras, sumado al deterioro en la accidentalidad vial, revela las fallas en el sistema de transporte”.

“Lo que hay que entender es que en transporte y movilidad no existe la solución, sino un conjunto de soluciones integrales que causan mayor sinergia, es decir en el Metro no solamente sino en el sistema de transporte, el metrocable, el Transmilenio, las ciclo-rutas, las bici-rutas, los carriles exclusivos para las motos, es una solución que contiene muchas partes, pero no hay una solución única en ese sentido y en esas soluciones parciales se ha avanzado relativamente poco”, concluyó el experto.