Conozca beneficios y sáquele provecho a las zonas húmedas | El Nuevo Siglo
Foto cortía Hotel La Ópera
Viernes, 24 de Febrero de 2017

Las mejores comodidades priman al momento de buscar un hotel para hospedarnos unos días, salir de una rutina, pasar un momento romántico a lado de la persona que queremos o para relajar el cuerpo y poder embellecerlo para retomar nuestros días laborales con la mejor energía.

 Son muchos los hoteles que ofrecen zonas húmedas para sus huéspedes, asi como las personas que buscan estas en otros lugares para procurarse relajación y salud. El hotel de la Ópera, ha emprendido una campaña educativa para que las personas exijan que estos servicios además de placenteros sean idóneos.

 Turco: Javier Escaned, cardiólogo del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, explica que “gran parte del beneficio que aporta radica en el gran cambio de temperatura que se produce al pasar del calor elevado al frío de la ducha o baño posterior”.
Como beneficios se resalta que impide el proceso de sudoración porque el ambiente está saturado de vapor de agua y el  calor ayuda acelerar las funciones metabólicas, aumentando la respiración y la frecuencia cardiaca.

 Sauna: El experto en dolor Meter Vicente, ex presidente de la sociedad americana del dolor y psicólogo clínico, responsable de salud de Riverhills, Cincinati, OH, afirma que “Durante siglos, los responsables de cuidar la salud han usado el calor tópico para aliviar dolencias menores y dolor en general, pero, hoy en día estamos empezando a comprender toda la serie de beneficios terapéuticos que ofrece el calor”.

 Entre los beneficios destaca que elimina del cuerpo metales pesados, alcohol y nicotina, asi como que en el sistema cardiovascular aumenta el ritmo del corazón y dilata los vasos, lo que acelera el metabolismo y quema alrededor de 300 calorías.

 Jacuzzi: Un jacuzzi proporciona el calor, el masaje y la flotabilidad necesarias para el bienestar de los enfermos de artritis. La flotabilidad del agua disminuye el estrés sobre las articulaciones y estimula el movimiento. Los ejercicios dentro del agua pueden incluso actuar como resistencia para ayudar a construir fuerza muscular”, avala la fundación Artritis: Spas, piscina y artritis. Sus beneficios más comunes que ayuda en la recuperación de fracturas y lesiones musculares, al igual que combate el insomnio.

Para aprovechar estos servicios es recomendable  utilizar dos baños por día y acceder a todas las zonas húmedas que ofrece para aprovecharlas al máximo. Las recomendaciones para un orden adecuado son:

*  En un día se recomienda realizar ejercicio físico en la piscina y después hacer uso del sauna después de un rato para relajar el cuerpo y sentir una sensación placentera.

*  Para utilizar todas las zonas húmedas en un día se recomienda empezar con el sauna, durar aproximadamente cinco minutos, posteriormente una ducha, luego otros cinco minutos más. Después del sauna entrar al baño turco repitiendo el mismo procedimiento y por último el jacuzzi durar de 10 a 20 minutos, porque deja los poros abiertos.