Circular azul para directivo de Reficar | El Nuevo Siglo
Foto Reficar
Miércoles, 17 de Enero de 2018
Redacción Web
Él y otros cuatro altos cargos de la Refinería de Cartagena fueron cobijados con diversas medidas judiciales.

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Con circular azul de Interpol fue cobijado Massoud Deihdeban, director de proyectos y representante legal de CB&I, para que sea obligado a cumplir con una medida de aseguramiento que le fue impuesta en Colombia.

Una vez sea ubicado por Interpol, Deihdeban, que ha comparecido por videoconferencia desde Houston, deberá ser deportado desde donde se encuentre para responder por los delitos de peculado por apropiación y enriquecimiento ilícito en relación con los millonarios sobrecostos que se generaron en la modernización de la planta de Refinería de Cartagena (Reficar).

La orden de captura internacional fue dictada este miércoles por el Juez 16 de Garantías de Bogotá quien consideró que el directivo “atentó contra varios bienes jurídicos protegidos” y “su comportamiento es reprochable, en la medida en que hay un grado alto de probabilidad de que este ciudadano se haya apoderado de dineros del Estado, para lo que se valió de maniobras que lo permitieron”, por lo que representa un peligro para la sociedad.

Con Deihdeban otros directivos fueron conminados a no comunicarse con las víctimas y a presentarse al juez en persona o por videoconferencia cada vez que sean requeridos.

Además, Orlando José Cabrales, expresidente de Reficar, deberá presentarse los cinco primeros días de cada mes; Philip Kent Asherman, exdirectivo de CB&I, deberá presentarse en el consulado de Colombia en Texas dos veces al mes; Pedro Alfonso Rosales, exvicepresidente ejecutivo del Downstream de Ecopetrol, y Carlos Alberto Lloreda, exmiembro de la mesa directiva de Reficar, tienen prohibido salir del país.

Como lo informó oportunamente EL NUEVO SIGLO, el martes el juez les dio casa por cárcel al exvicepresidente de Reficar, Felipe Laverde, y a uno de los expresidentes de la sociedad Reyes Reynoso.

Cabrales y Rosales fueron llamados a juicio por el delito de interés indebido en la celebración de contratos, y Llorera por falsedad ideológica en documento público y complicidad en peculado por apropiación a favor de terceros, en tanto que la Fiscalía le imputó a Asherman el delito de interés indebido en la celebración de contratos en calidad de interviniente, a Reynoso los delitos de peculado por apropiación a favor de terceros y varios concursos de falsedades ideológicas en documento público, y a Laverde los delitos de interés indebido en la celebración de contratos, peculado por apropiación en favor de terceros e enriquecimiento ilícito a favor de terceros.