Debido al temor de que la deuda pública se incremente y que pueda llegar a 38% en los próximos dos años, la calificadora de riesgo Standar& Poor’s, S&P, decidió mantener la perspectiva negativa a la nota crediticia soberana del país.

Esta medida contrasta con los deseos del Gobierno que esperaba que ante la entrada en vigor de la reforma tributaria, el país pudiera tener una mejor perspectiva en sus riesgos crediticios. 

Cárdenas estuvo en Estados Unidos y se reunió con los directivos de las tres calificadoras, Moody’s, S&P y Fitcht.

De acuerdo con la calificadora S&P, “la perspectiva negativa refleja el riesgo de que podamos reducir nuestras calificaciones en Colombia si su balance externo o su carga de deuda fiscal no mejora en los próximos 18 meses".

En la nota, Standard & Poor's menciona que la caída en los precios mundiales de las materias primas ha influido en la reducción de las exportaciones de Colombia, la perspectiva de crecimiento y los planes de inversión. 

Sin embargo, la firma ha decidido afirmar que “la nota de crédito soberano a largo plazo en moneda extranjera Rating 'BBB' y la calificación soberana de largo plazo en moneda local de BBB+” y destacó el compromiso político que implicó la reforma fiscal.

Fitch y Standard & Poor´s pusieron al país en categoría negativa el año pasado. S&P determinó rebajar a negativo el panorama de la deuda de Colombia producto de los efectos de los bajos precios del crudo y sus efectos en el déficit presupuestal. 

Crecimiento

Sin embargo, mantuvo la nota soberana en BBB e indicó que las perspectivas de crecimiento se han deteriorado debido al panorama internacional.

De acuerdo con la directora de investigaciones económicas del BBVA, Juana Téllez  la noticia es positiva e indicó que la aprobación de la Reforma Tributaria Estructural fue clave para no presentarse cambio.

"La nota de crédito soberano a largo plazo en moneda extranjera Rating 'BBB' y la calificación soberana de largo plazo en moneda local de BBB+", reitera.

“Creemos que el paquete fiscal que aprobó el Congreso a finales de 2016 muestra un importante compromiso político para reforzar la base impositiva en los próximos años y reducir gradualmente el déficit de las administradoras públicas, pero esperamos que la deuda pública neta frente al PIB aumente ligeramente hasta el 38% durante los próximos dos años”, puntualiza.

A tiempo

Antes de esta medida, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, sostuvo que confiaba en que a Colombia ninguna de las agencias calificadoras de riesgo le va a bajar la nota, actualmente en triple B (BBB). 

Añadió que el motivo de su viaje a Estados Unidos era para la calificación de Colombia como país emisor de bonos. Al respecto recordó que dos de las tres agencias calificadoras “nos pusieron en perspectiva negativa, es decir, nos hicieron una advertencia sobre la necesidad de ajustes, que si no los hacíamos, entrábamos en posibilidad de que nos bajaran la nota de BBB a BBB- (triple B negativa”. Pero añadió: “eso no ha ocurrido, el país actuó a tiempo, sacó adelante su reforma tributaria y no va a haber calificación negativa. Lo que queremos es que se quiten las perspectivas negativas y se regrese a perspectiva estable”. 

Sobre la baja en la calificación que hizo Fitch al sistema financiero, consideró que “es debatible”, pues, añadió, “los bancos colombianos tienen un buen nivel de capital”. 

En el caso de los bancos, según la calificadora Fitch, la reducción es consecuencia del debilitamiento de la suficiencia de capital, si se compara con sus pares internacionales.

La Superintendencia Financiera dijo que las afirmaciones de Fitch sobre el estado de la banca local habían sido hechas en base a las estimaciones económicas para 2017 antes de la aprobación de las reformas fiscales.

En segundo lugar, la Superfinanciera resalta el reconocimiento que hizo la calificadora sobre la diversificación y el costo relativamente bajo del fondeo.

Con respecto a la capitalización, la entidad destacó que “la solvencia del sector bancario es de 15,46% frente a un mínimo regulatorio exigido de 9%”.

Adicional a eso, la Superfinanciera explicó que las metodologías que utiliza la calificadora no tienen en cuenta aspectos de la regulación colombiana, como los Activos Ponderados por Nivel de Riesgo, que hacen a la banca local más fuerte que sus pares de la región.

Sobre la advertencia que hizo Fitch por el incremento de la cartera vencida, la Superfinanciera respondió que las provisiones de la banca representan 139% de la cartera vencida.