Fitch bajó la nota a bancos colombianos | El Nuevo Siglo
Foto Alcaldía de Bogotá
Jueves, 16 de Febrero de 2017
Redacción Economía

La calificadora internacional de riesgo, Fitch Ratings bajó a negativa la perspectiva de los bancos colombianos para 2017.

Según la calificadora, la reducción es consecuencia del debilitamiento de la suficiencia de capital, si se compara con sus pares internacionales.

Hace una semana el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, estuvo en Nueva York, donde presentó a las calificadoras de riesgo los avances de Colombia en materia fiscal, pero esto no evitó la baja nota de Fitch a la banca nacional.

Para Colombia la calificadora de riesgo internacional Fitch estimó un crecimiento económico de 2,3% para 2016, reflejando el ajuste en la política monetaria y el gasto público menor.

Según los datos analizados por la entidad, el crecimiento de los préstamos brutos se desaceleró a 11,7% a fines de junio de 2016 (año a año), como consecuencia del apetito de riesgo cauteloso para todos los segmentos y una demanda más débil.

La desaceleración se debió a las perspectivas económicas inciertas, el impacto del fenómeno de El Niño y los retrasos en los proyectos de infraestructura. Sin embargo, esto todavía no ha tenido una afectación sobre la calidad de activos de los bancos.

 

Perspectivas débiles

Las perspectivas más débiles para la economía colombiana en el mediano plazo resultarán en un deterioro cíclico en los indicadores de calidad de préstamos de los bancos, especialmente en los segmentos más riesgosos: de consumo y microfinanciero.

En general, la rentabilidad debería permanecer estable o caer levemente para aquellos bancos que poseen concentraciones altas en estos segmentos. Sin embargo, una economía frágil, una mayor tasa de desempleo y la volatilidad cambiaria probablemente presionarán los costos de crédito en 2017.

Sin embargo, los ingresos no financieros provenientes de comisiones y ganancias por transacciones bursátiles y derivados podrían compensar parcialmente el impacto negativo sobre la rentabilidad total.

Si bien la inflación ha mostrado señales de alcanzar su punto máximo, Fitch estima que tomará más de un año para volver al rango meta. La política monetaria más ajustada ha aumentado los costos de fondeo, situación agravada por el aumento en los depósitos de más largo plazo.

Dada la buena cobertura de reservas y eficiencia, así como los flujos de ingresos relativamente diversificados, los bancos más grandes están bien posicionados para enfrentar estos desafíos en comparación con sus pares más pequeños, aunque los índices de capital ajustados reducen su margen de maniobra. La depreciación significativa del peso colombiano en 2015 y el primer trimestre de 2016, así como los cambios en las normas contables, han deteriorado los indicadores de suficiencia de capital, especialmente para los bancos grandes con inversiones en el extranjero.

Como resultado, estas entidades han tomado medidas para mejorar su suficiencia de capital, administrando sus balances mediante un crecimiento menor y mayores utilidades retenidas, entre otras acciones.

El regulador financiero de Colombia promulgó reglamentos para acercarse a Basilea III y las regulaciones de capital colombianas han mejorado gradualmente, pero aún están rezagadas con respecto a las mejores prácticas de la región.

Regulaciones para el uso de capital híbrido con capacidad de absorción de pérdidas son positivas, en opinión de Fitch, aunque su alcance permanece poco claro. El regulador definió el marco para capital de Nivel Secundario, pero permitirá seguir usando bonos subordinados del estilo antiguo que no poseen crédito patrimonial hasta 2017.

Debido a que los bancos se aprovecharán de esto, Fitch anticipa que los índices de capital regulatorio locales continuarán divergiendo materialmente de los indicadores de capital más estrictos aceptados a nivel mundial.

El informe de Fitch también dice que “el 47% de los bancos sudamericanos (excluyendo a Brasil) tiene perspectivas de calificación negativas en escala internacional o calificaciones bajas sin Perspectiva, comparado con 33% a noviembre de 2015. Las Perspectivas de los bancos colombianos y ecuatorianos fueron revisadas a negativas en congruencia con las perspectivas de sus soberanos”.