Colombia salió bien librada, en términos generales, en el cuarto informe trimestral del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, sobre la Misión de Verificación del Acuerdo Final de Paz.

En el documento se destacan algunos avances en la implementación del Acuerdo, y proyecta las que considera deben ser las prioridades para 2021.

El texto, que analiza el periodo del 26 de septiembre al 28 de diciembre de 2020, reconoce avances en la reducción de los niveles de violencia, la justicia transicional, la reincorporación de excombatientes y la instrumentación de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), pero hace énfasis en la necesidad de garantizar la seguridad de los excombatientes, las comunidades afectadas por el conflicto, los líderes sociales y los defensores de los derechos humanos.

Al respecto, el consejero presidencial para la Estabilización y la Consolidación, Emilio Archila, dijo que el Gobierno nacional “agradece” el informe y reiteró el compromiso para la implementación del Acuerdo de Paz.

Según Archila, el documento reconoce “los significativos avances” que ha tenido la implantación de la política de Paz con Legalidad en la reducción de los niveles de violencia, la aplicación de la democracia, la justicia transicional, la de reincorporación de excombatientes y la puesta en marcha de los PDET.

Por su parte, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) destacó que el informe recoja el anuncio de que a mediados de 2021 se impondrán las primeras sanciones para definir responsabilidades individuales por crímenes cometidos durante el conflicto.

Así mismo, la JEP destaca lo dicho por el informe sobre el avance en sus siete macrocasos, los testimonios que han permitido localizar seis fosas comunes en Dabeiba (Antioquia) con restos de posibles víctimas de ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas y la entrega a sus familias de los restos de cuatro personas, incluidos dos menores. Igualmente, la Misión de Verificación reconoce el trabajo de la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas y de la Comisión de la Verdad.

Las observaciones

El documento, que será presentado el próximo 21 de enero ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidad por el jefe de la Misión de Observación, Carlos Ruiz Massieu, destaca varias prioridades para este año en la implementación del Acuerdo de Paz.

La seguridad y protección de excombatientes, pues dice que desde la firma del Acuerdo se han verificado 248 asesinatos de exintegrantes de las Farc, 73 de ellos en 2020. Además de 42 asesinatos de líderes sociales y activistas de derechos humanos y 13 masacres.

Agrega que en Meta, Caquetá y Guaviare las disidencias de las Farc han aprovechado la escasa presencia del Estado para “ampliar sus operaciones, atacar a excombatientes y sabotear las iniciativas económicas, política y sociales de la zona”.

Sin embargo, el documento también advierte que “está pendiente desde hace mucho tiempo la elaboración de una política pública para el desmantelamiento de los grupos armados ilegales y las organizaciones criminales y sus redes de apoyo, cuya formulación es el mandato principal de la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad”.

La segunda prioridad que sugiere Guterres son las medidas para asegurar que el proceso de reincorporación de excombatientes sea sostenible.

Aunque destaca los avances en los PDET reclama “mayor atención” a los proyectos productivos mediante asistencia técnica, mayor acceso a los mercados, y mayor participación de las mujeres excombatientes en los espacios de toma de decisiones.

También insiste en “la presencia integral del Estado como condición para una paz duradera y para el desarrollo sostenible”.

Como cuarta prioridad, el informe plantea “reforzar el diálogo constructivo entre las partes a través de los mecanismos estipulados en el Acuerdo”, como la Comisión de Seguimiento, Impulso y Verificación de la Implementación del Acuerdo Final.

Por último, Guterres plantea “fortalecer las condiciones para la reconciliación valiéndose del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición; y del Consejo Nacional de Paz, Reconciliación y Convivencia”.

Guterres se mostró confiado en que “las instituciones gubernamentales pertinentes harán todos los esfuerzos necesarios para implementar los compromisos asumidos por el Presidente Duque en la reunión”.

Y concluye: “Ahora que el país entra en el quinto año de construcción de la paz en el marco del Acuerdo Final, felicito a los colombianos y las colombianas por los logros alcanzados en el proceso de paz hasta la fecha y aliento a las partes a perseverar para que el potencial transformador del Acuerdo se materialice plenamente”.